Abanca aspira a crecer en la cornisa cantábrica y cree que Bruselas le permitiría comprar red de otra entidad

Francisco Botas, Juan Carlos Escotet y Javier Etcheverría (Abanca)
OSCAR PINAL

La entidad negocia con el FROB anticipar el pago pendiente por hacerse con NCG, previsto para 2016 (100 millones), 26 Feb. (200) - y 2018 (300)

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 26 (EUROPA PRESS)

Abanca aspira a crecer en la cornisa cantábrica y cree que "no debería haber problema" para que la Unión Europea le permitiese comprar parte de red de otra entidad financiera con el objetivo de materializar dichos planes de expansión.

Lo ha señalado el vicepresidente de la entidad, Juan Carlos Escotet, durante la rueda de prensa de presentación de resultados este jueves en la sede que la entidad tiene en la plaza de Cervantes, en Santiago de Compostela.

"Pues mira, la verdad no se lo hemos preguntado; pero imagino que, de presentarse la oportunidad, no debería haber problema", ha respondido Escotet a la pregunta concreta sobre dicha adquisición de red.

Junto a él, además, el consejero delegado de Abanca, Francisco Botas, ha ratificado que el "proyecto" de esta institución financiera es de "crecimiento en el norte de España, desde Galicia". "Siempre lo hemos dicho", ha apostillado Botas.

El banco, heredero de las antiguas cajas de ahorro gallegas --Caixa Galicia y Caixanova--, experimentó desde su nacimiento como NCG Banco --resultado de la bancarización de la fusión de las dos cajas-- un proceso de redimensionamiento en el número de oficinas y concentración geográfica de su actividad en el noroeste peninsular, en parte, obligado por las directrices que impuso Bruselas por la percepción de ayudas públicas.

ANTICIPO DEL PAGO AL FROB

En el proceso, la entidad fue nacionalizada y posteriormente subastada, con la consiguiente adquisición por parte del grupo venezolano Banesco, propiedad de Juan Carlos Escotet y que, hasta el momento, ya abonó 403 de los 1.003 millones por los que se adjudicó NCG.

Este jueves, también, Escotet ha indicado que la dirección no descarta "la posibilidad de anticipar ese pago" pendiente, de 600 millones, cuyo calendario está previsto para 2016 (100 millones), 2017 (200) y 2018 (300).

En una jornada en la que los responsables de Abanca han dado a conocer unas ganancias de más de 1.100 millones de euros en el primer año de vida de la entidad "en su nueva etapa", 2014, el dueño de Banesco ha reconocido que "sí" vería "razonable" el adelanto del abono, "dada la holgura" de los resultados.

Con todo, ha apuntado que "librar un pago acelerado de esa obligación" requiere el "consentimiento" del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), y "todavía" no existe "un acuerdo definitivo" al respecto. "Algo hemos adelantado con ellos", ha revelado.

DESARROLLO "PROGRESIVO"

En cuanto a los planes de expansión, Escotet ha matizado que "esa presencia" deseada en la cornisa cantábrica se irá "desarrollando progresivamente".

"Preferimos claramente el crecimiento orgánico", ha puntualizado, antes de agregar, sin embargo, que "por supuesto" Abanca no está "cerrada a ninguna otra opción". "La holgura de patrimonio que tenemos permite siempre estar pendientes de cualquier buena oportunidad que pueda presentarse", ha llamado la atención.

DIVIDENDO "ESCASO"

Asimismo, cuestionado sobre el destino de los beneficios anunciados este jueves, el vicepresidente de la entidad ha indicado que el reparto de un "escaso dividendo" vendrá definido en función de esa reducción de la deuda con el FROB. Así pues, ha dicho, "dependerá mucho de los acuerdos a los que se pueda llegar".

En este sentido, ha hecho hincapié en que el proyecto del banco está pensado "a largo plazo", de manera que la recomendación que hará la dirección al consejo de administración será la de no repartir dividendos "más allá del 15% de esa cuenta de resultados". "Habrá que verlo", ha añadido, para reiterar que un dividendo "de esa naturaleza" dependerá "de los acuerdos" a los que Abanca llegue con el FROB.

"POSICIÓN DOMINANTE"

Por último, en este ámbito, ha insistido en que los actuales propietarios tienen "la vocación" de "retener el control mayoritario" de Abanca tras su salida a bolsa, algo que se prepara con el horizonte de 2018.

Como hiciera en su anterior comparecencia en este mismo escenario para dar cuenta de los resultados de la entidad sin cerrar el año, inquirido por los periodistas, Juan Carlos Escotet ha garantizado que mantendrán "siempre una posición dominante".

A este respecto, ha reivindicado la "apuesta" por una "gobernanza" que, ya desde ahora, equipare a la institución con las que ya cotizan. "Estamos muy cerca, y en algunos temas mejor", ha asegurado, en alusión a una de las últimas decisiones del Consejo Nacional del Mercado de Valores (CNMV) relativa a que al menos el 50% de los miembros del consejo de administración sean independientes.

"Ya cumplimos eso", ha constatado Escotet, para tratar de demostrar que su propósito es ser una empresa "transparente y muy apegada a las mejores prácticas".

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