(Amp.) Santamaría no valora la sentencia del TS sobre ultraactividad de convenios porque no se ha publicado

Soraya Saez de Santamaría y Antonio Hernando.
EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 22 octubre 2015 17:25


MADRID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha declinado valorar la sentencia del Tribunal Supremo (TS) sobre la ultraactividad de los convenios porque aún no se ha hecho pública, pero ha defendido los resultados positivos que está teniendo la reforma laboral de 2012.

Durante la sesión de control al Gobierno en el Pleno del Congreso, el portavoz parlamentario socialista, Antonio Hernando, ha preguntado a la vicepresidenta por el fallo del Alto Tribunal, que el pasado 19 de diciembre "decidió que las condiciones pactadas en un contrato, directamente o por referencia a un convenio, tienen naturaleza jurídica y se pueden exigir".

"El núcleo central de la reforma laboral de 2012 es la pérdida de vigencia de la ultraactividad de los convenios, una demanda largamente reclamada por los empresarios y que consiguieron con ustedes. ¿Qué va a hacer el Gobierno tras conocer esta resolución?", se ha interesado el responsable del PSOE, reclamando a la vicepresidenta que "sea rigurosa y diga la verdad" sobre si reformarán la normativa laboral y cuántos trabajadores se verán afectados por el fallo.

Sáenz de Santamaría, por su parte, ha expresado el "respeto" del Ejecutivo hacia las resoluciones judiciales pero ha recordado que "para valorarlas bien hay que conocerlas". "Y esa sentencia aún no ha sido publicada, con lo que esperaremos a que se publique para valorarla. Es lo que exige el rigor", ha apostillado.

"ULTRAPASIVIDAD" DEL PSOE

A renglón seguido, ha preguntado al principal partido de la oposición por qué, "ya que lo recurre todo", no incluyeron este aspecto de la reforma laboral en el recurso presentado ante el Tribunal Constitucional, ante el que sí se denunciaron otras partes de la normativa de 2012.

Además, ha defendido los resultados de esta reforma, que ha permitido que el año pasado se celebraran un 45% más de convenios que en 2011, que hubiera un 47% menos de expedientes de regulación de empleo (ERE) y que la conflictividad laboral descendiera un 25% respecto del ejercicio anterior. Asimismo, la afiliación se ha incrementado en 400.000 personas y crecen los contratos indefinidos, un dato que contrasta con los 3,5 millones de parados más con los que se saldó la reforma laboral de los socialistas.

"El problema que les preocupa a ustedes y por el que no les gustan las reformas del PP es porque les ponen en evidencia, porque lo que dice el Fondo Monetario Internacional (FMI) les ponen en evidencia. Y usted me viene a hablar de ultraactividad cuando se ha demostrado que en este país la crisis ha sido tan grave por la ultrapasividad del PSOE tanto en el Gobierno como en la oposición", ha zanjado.

CLAVE DE BÓVEDA DE LA REFORMA

Sin embargo, Hernando ha insistido en que el fallo judicial, cuyo contenido esencial "se conoce desde hace un mes", pone la "clave de bóveda" de la reforma laboral a los pies de los caballos y "restituye a los trabajadores de la situación de debilidad" en la que el Gobierno les había puesto al provocar un "empeoramiento" de sus condiciones laborales y un "abaratamiento" de sus salarios.

Por eso, ha pedido explicaciones a la vicepresidenta, a la que ha recomendado que "no pierda los papeles" ni el "rigor y el sentido institucional" como le ha sucedido, a su juicio, al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al avanzar que los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que se publicarán este jueves serán positivos.

"El rigor y el sentido institucional hacen que el presidente no deba utilizar la EPA, cuyos datos no han salido. Un poquito de vergüenza", ha espetado Hernando, a lo que Sáenz de Santamaría le ha replicado ironizando con su "osadía" por "hablar de perderse" cuando "los que tienen problemas de orientación" son los socialistas, en referencia al incidente de la semana pasada del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que no llegó a una conferencia en Estados Unidos por confundir la dirección del evento.

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