SAN LORENZO DE EL ESCORIAL (MADRID), 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha calificado este miércoles de "muy desafortunadas" las declaraciones del presidente de la CEOE, Juan Rosell, sobre "el millón de amos y amas de casa" que, según el dirigente empresarial, se han apuntado al paro en los últimos años ante la perspectiva de poder cobrar un subsidio.
"No me parecen nada afortunadas las palabras del presidente de la CEOE. Aunque él no lo pretende, yo creo que no lo pretende, se pueden interpretar como que está culpando a los parados del aumento del paro y ahora también a los cónyuges de los desempleados", ha indicado.
El dirigente sindical ha señalado además que "no sabe" de dónde saca Rosell esa cifra. "Yo sé que maneja con asiduidad estadísticas, pero nosotros también y no sabemos cómo ha llegado a esa conclusión", ha precisado.
Méndez, en declaraciones a la prensa antes de participar en un curso de verano de la Universidad Complutense, ha recordado que, en España, para tener derecho a la protección por desempleo y al subsidio se exige haber trabajado previamente. Incluso en el caso de las rentas de inserción, ha añadido, se pide llevar como mínimo once meses buscando trabajo.
En su opinión, las amas de casa que se inscriben en las oficinas de los servicios públicos de empleo "lo que buscan es un trabajo" porque su pareja ha perdido el suyo y puede que incluso lleve en el desempleo uno, dos o tres años. "Es normal que el cónyuge intente buscar un empleo", ha subrayado.
Así, para Méndez, expresiones como la utilizada por el presidente de la CEOE son "muy desafortunadas" porque al final lo que se pretende es buscar, con excusas de mal pagador, explicaciones al volumen de paro tan enorme que hay en España. "Pero son explicaciones que tienen corto recorrido", ha añadido.
SÍ A HABLAR DE LA NEGOCIACIÓN COLECTIVA.
En lo que sí está de acuerdo Méndez con Rosell es en la apuesta que el dirigente empresarial hizo ayer por la negociación colectiva.
Según ha explicado Méndez, en esta materia, lo que quieren los sindicatos es que el Gobierno no intervenga y los agentes sociales puedan buscar "libremente" soluciones en la negociación colectiva.
"Tenemos absoluta disposición, a pesar de que la reforma laboral ha debilitado la negociación colectiva", ha subrayado el líder de UGT.
