MADRID, 24 May. (EUROPA PRESS) -
UGT ha ganado 2.083 afiliados netos en el primer trimestre de este año y 9.505 si se comparan los datos de los tres primeros meses del año con los del mismo periodo de 2017.
El sindicato, que ha analizado estos datos durante la reunión de su 4º Comité Confederal, ha defendido que, "a pesar de lo que dicen algunos", UGT está creciendo y no ha perdido la mitad de su afilición ni sufrido "una avalancha de bajas".
La organización que dirige Pepe Álvarez destaca además que cerró 2017 con una representatividad del 36,95% tras ganar las elecciones sindicales "por primera vez en una década".
El 4º Comité Confederal de UGT ha aprobado además una resolución, por unanimidad, por la que reforzará su proceso de movilizaciones para recuperar derechos, acabar con la "avaricia" empresarial y con la parálisis de la negociación colectiva y del diálogo social.
Según el sindicato, "la avaricia de la patronal impide cualquier atisbo de acuerdo en materia de negociación colectiva".
"Siguen planteando propuestas que sólo cabe calificar como extremistas, en la medida en que plantean la desregulación prácticamente total del tiempo de trabajo, una contratación a la carta que institucionaliza la precariedad laboral, y la eliminación de derechos laborales básicos, conquistados durante décadas por la clase trabajadora", subraya.
De esta forma, el Comité de UGT ha refrendado que, en estas condiciones, "el consenso no es posible". "Cualquier acuerdo ahora solo puede contener garantías de ganancia de poder adquisitivo para los salarios y recuperación de parte de los derechos arrebatados", añade en su resolución.
Asimismo, UGT denuncia en su resolución que el Gobierno "carece de sensibilidad social y sólo está pendiente de sus intereses electorales", al tiempo que expresa su rechazo a los Presupuestos Generales del Estado para 2018 por no atender "las verdaderas necesidades del país".
El Comité Confederal del sindicato ha aprobado también una resolución de urgencia para advertir del aumento de la siniestralidad laboral como consecuencia de la precariedad laboral y la "relajación empresarial" en el cumplimiento de las normas legales.
En dicha resolución, UGT exige que se derogue la reforma laboral por el deterioro que, a su juicio, supone para las condiciones laborales y la negociación colectiva, e insta al Gobierno a que incluya la seguridad y salud de los trabajadores como una prioridad en sus políticas.
