MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Círculo de Empresarios ha advertido este lunes de que algunos indicadores reflejan que se está produciendo una desaceleración "muy fuerte" de las inversiones interiores y exteriores en Cataluña, que podría llegar a lastrar "enormemente" la capacidad de crecimiento de la región, aunque por el momento conlleve un impacto "relativamente pequeño" en la demanda interna a nivel nacional.
En la rueda de prensa para valorar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2018, el presidente del Comité de Economía y Presupuestos del Círculo de Empresarios, Josep Piqué, ha calificado de "prudente" la previsión del Gobierno de crecimiento del 2,7% para España, y cree que "lo más probable" es que incluso la cifra sea mayor, así como de "coherente" la estimación de empleo de 475.000 nuevos puestos de trabajo.
No obstante, ha indicado respecto a la situación en Cataluña, que "evidentemente" ya hay un impacto derivado de la crisis política en la región, que de momento es "relativamente pequeño" e incluso inferior al que se podía prever, gracias al buen comportamiento de la demanda interna, particularmente del consumo, y sobre todo del sector exterior y las importaciones, que sigue funcionando "muy bien".
Sin embargo, ha advertido de la "preocupación" sobre el impacto que pueda tener la crisis política catalana en las decisiones de inversión en Cataluña, ya que, si bien de momento la formación bruta de capital se está comportando "bien", algunos indicadores ya apuntan a que se está produciendo una desaceleración "muy fuerte" de las inversiones en Cataluña, tanto nacionales como exteriores.
"Es un impacto relativamente pequeño a día de hoy pero puede lastrar enormemente la capacidad de crecimiento de Cataluña si no se corrige", ha avisado Piqué, quien ha remarcado la necesidad de que se recupere la estabilidad política, el sentido común y se respete la Constitución y el Estatuto de Autonomía. "Cuanto antes se recupere la normalidad, mejor", ha enfatizado.
El exministro ha insistido en que el impacto de la crisis política en Cataluña, que ya se ha producido con la fuga de empresas y se ha notado en sectores como el de la hostelería y el hotelero, puede se aún "mucho mayor" por esa reducción "tan significativa" de las decisiones de inversión.
