Augura "oportunidades de integración" en el sector financiero español y europeo por la unión bancaria
BARCELONA, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de CaixaBank, Isidre Fainé, ha afirmado este jueves que la entidad está "en buena posición" de solvencia y liquidez, entre las mejores de Europa, para afrontar los nuevos test de estrés del Banco Central Europeo (BCE) antes de asumir el rol de supervisor único.
En su discurso en la junta anual de accionistas, ha destacado que el grupo ha cumplido sus objetivos del plan estratégico 2011-2014 y afronta el futuro "con optimismo y perspectivas renovadas" en un contexto de recuperación económica alcanzado tras un proceso de reformas del que ha alertado que todavía no se puede bajar la guardia porque debe proseguir.
"Hemos dejado atrás la recesión, y hay que ver ahora cómo llegan las mejoras al conjunto de la sociedad", ha añadido, y ha abogado por una estrategia de inicio de subida de tipos de interés en Europa para ayudar a la recuperación sin descontrolar la inflación.
En España, ha definido 2014 como el "año de la recuperación", impulsado por el sector exterior pero también con la recuperación del consumo y de la inversión por la mejora de la confianza, así como con el inicio de la creación de empleo, entrando en un círculo virtuoso que debe permitir más inversiones y un mayor ritmo de creación de puestos de trabajo.
En el sector financiero, ha augurado "nuevas oportunidades de integración" en el mercado español y europeo en el ámbito de la Unión Bancaria, en lo que jugará un papel clave la batalla de los costes operativos.
NUEVA ESTRUCTURA
Respecto a la transformación de La Caixa en fundación bancaria que controlará CaixaBank a través de Criteria, ha asegurado que la nueva estructura "aportará mayor especialización y eficiencia" al grupo, con la actividad financiera y la deuda en manos de Criteria y la fundación bancaria centrada en la Obra Social.
El vicepresidente y consejero delegado de CaixaBank, Joan Maria Nin, ha repasado en la junta que desde 2007 la entidad ha crecido un 30% en clientes, un 40% en recursos y un 28% en créditos, ha multiplicado por 2,4 la liquidez y la ratio de solvencia ha pasado del 8% al 12,9%, y ha expuesto que el banco afronta el futuro con la intención de "recuperar gradualmente la rentabilidad, después de que se estabilicen el entorno y las dotaciones".
En su discurso, Fainé también ha tenido un recuerdo para el recientemente fallecido Ricard Fornesa, del que ha afirmado que ha dejado un vacío muy importante, y lo ha definido como gran presidente de la entidad, con una "generosa y constante actitud de servicio a La Caixa" y su Obra Social.
Asimismo, ha dado la bienvenida a Amparo Moraleda y Antonio Sáinz de Vicuña como consejeros independientes --a la espera de la aprobación de la junta este jueves--, que toman el relevo de Isabel Estapé y Susana Gallardo, a las que Fainé ha agradecido su colaboración de los últimos años, en un periodo difícil.
