Acusan a la compañía de actuar con "mala fe" y le recuerdan su compromiso de no adoptar medidas en contra del empleo
MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
Empleados de la cadena Blanco, propiedad del grupo saudí Alhokair, se movilizarán este domingo en Madrid en protesta por el nuevo Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que pretende aplicar la firma, con un total de 1.250 trabajadores en España, y ante el posible traslado de la sede a Dubai.
Según han explicado a Europa Press en fuentes sindicales, la decisión de un eventual cambio de la sede al emirato árabe respondería a razones fiscales, al ser un territorio con baja o nula tributación, y a que el grupo saudí ya gestiona departamentos de la firma textil desde allí.
Ante este escenario, los trabajadores de la cadena de moda se concentrarán este domingo, 1 de marzo, frente a la tienda ubicada en la madrileña calle de Fuencarral entre las 12.00 y las 13.00 horas.
Las mismas fuentes han acusado al grupo Alhokair de actuar con "mala fe", ya que hace quince días se reunió con los representantes sindicales para analizar un informe trimestral de evolución de empleo en el que aseguraba que no se preveían medidas que pudieran afectar al empleo en el plazo de tres meses, evaluando la posibilidad de externalizar siete tiendas.
Asimismo, han denunciado que la compañía únicamente se ha limitado a un "escueto comunicado" de preaviso de iniciar conversaciones con los representantes de los trabajadores el próximo 23 de marzo para la negociación del ERE ante la situación actual de "invialidad" de Blanco, con un total de 121 tiendas en España.
"Blanco lleva tiempo analizando y tratando de buscar una solución a su situación actual de inviabilidad. Las exigencias del mercado le han llevado a estudiar todas las medidas a su alcance para lograr revertir esta circunstancia, que no es buena ni para la empresa ni para sus trabajadores", subraya la compañía textil en su comunicado.
Con el fin de iniciar las conversaciones con los trabajadores, la compañía envió el pasado miércoles una comunicación formal a todos los centros de trabajo que no cuentan con representación sindical en este momento para que la designen.
"Este proceso se enmarca dentro de un proceso de transformación global de la compañía, orientado a mejorar su competitividad, eficacia y rentabilidad para, así, garantizar su futuro a largo plazo", ha subrayado la compañía, cuyo objetivo es encontrar las "mejores medidas" con el mayor consenso posible.
Blanco, que ya aplicó otra regulación de empleo que afectó a 711 trabajadores, presentó concurso de acreedores voluntario en junio de 2013 debido a la gravedad de sus problemas económicos y financieros.
A principios del año pasado, el grupo saudí Alhokair adquirió por más de 40 millones de euros la mayor parte de los activos de la cadena textil española Blanco y se comprometió a mantener y asumir los 1.200 puestos de trabajo.
En el auto de la venta, autorizada por el Juzgado de lo Mercantil número 8 de Madrid, al que ha tuvo acceso Europa Press, se destacaba también la importancia de la conservación de los empleos, ya que esos despidos generarían un importante volumen de créditos contra la masa derivados de las indemnizaciones laborales de dichos despidos.
