Pedro Bermejo: "La testosterona empuja a los hombres a arriesgar más en sus inversiones"

Pedro Bermejo
Foto: EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 5 junio 2015 12:19

MADRID, 5 Jun. (EDIZIONES) -

¿Alguna vez te has preguntado por qué invertiste cuando la Bolsa estaba más cara, adquiriste preferentes simplemente porque te lo recomendaron en tu banco o compraste un piso para especular porque viste al vecino hacerlo? ¿Quieres saber por qué vendiste tus acciones cuando valían menos o compraste una casa en los momentos más altos de la burbuja inmobiliaria?

Las teorías clásicas de la economía basadas en las matemáticas y la estadística no explican por qué tomas estas decisiones. Existe algo más que te lleva a actuar de forma errónea e irracional.

El neurólogo y presidente de la Asociación Española de Neuroeconomía, Pedro Bermejo, nos cuenta en '¿Quién responde?', la entrevista de cada viernes de Mercado Financiero, cómo la neurociencia puede ayudarte a entender por qué llevaste a cabo todas esas acciones y cómo puedes evitar volver a hacerlas.

En su libro 'El cerebro del inversor' (Ediciones Pirámide) Bermejo explica, a partir de los últimos conocimientos de la neurociencia, cómo el cerebro se enfrenta con las decisiones económicas. Además, "justifica todas aquellas decisiones de inversión erróneas que un día tomaste y de las que luego te arrepentiste", explica el autor en su libro.

- Usted habla en este libro sobre cómo la neurociencia está modificando el panorama económico actual. ¿Qué es la neurociencia y cómo se llega a relacionar esta disciplina con la economía?

Una de las ramas de la neurociencia es la neuroeconomía, que se dedica a estudiar cómo los seres humanos tomamos las decisiones. No sólo en términos económicos, sino para todos los ámbitos en los que intervenimos los seres humanos.

Dado que uno de los que más nos interesan a los seres humanos es la economía, es lógico pensar que la neuroeconomía sea aquí donde más se está desarrollando. Si sabemos cómo tomamos nuestras decisiones, también vamos a ser capaces de mejorar nuestras decisiones económicas.

- ¿Qué supone para el mercado de inversión conectar estas dos materias?

El mercado de inversión se puede beneficiar enormemente de cómo los inversores toman las decisiones. Ahora podemos explicar el origen de muchas burbujas y situaciones que no entendíamos y que tenían su origen en los comportamientos no racionales de los inversores.

- ¿Qué conocimientos sobre neurociencia se deben saber para realizar una buena inversión?

La neuroeconomía y la neurociencia ponen las bases para que los inversores tomemos decisiones más racionales. Saber cómo el cerebro nos influye y nos lleva a tomar decisiones emocionales, que en un gran número de ocasiones son erróneas, nos permitirá evitarlas y tomar decisiones más racionales, que suelen ser, aunque no siempre, más acertadas. La neurociencia hoy día nos brinda la posibilidad de mejorar nuestra capacidad de inversión.

- Afirma que cuando se quieren realizar inversiones influyen factores que el individuo tiene en cuenta de forma inconsciente y que no puede controlar. ¿Qué elementos son los que intervienen a la hora de realizar una inversión?

Son muchos los elementos que participan en la toma de una decisión. Por un lado, tenemos estructuras cerebrales que nos llevan a tomar una decisión o no y que son ligeramente diferentes en cada uno de nosotros. Pero también cada uno de nosotros tenemos recuerdos, memorias, niveles hormonales y emociones propias que nos empujan hacia uno u otro lado.

Es más, incluso factores ambientales como la luz, los ciclos lunares o el período del año influyen en nuestra percepción del riesgo y, por tanto, en nuestras capacidades para elegir la mejor opción de inversión.

- ¿Puede decirse que el cerebro te manipula y es la causa de que actúes de forma errónea y evites tomar decisiones racionales? Por tanto, ¿hay que ser racional o emocional cuando se toma una decisión?

Nuestro cerebro no nos manipula, simplemente se ha desarrollado en un ambiente muy distinto al actual. Podemos decir que ha evolucionado a lo largo de miles de años para garantizar nuestra supervivencia a lo largo de la historia de la humanidad. Y la gran mayoría de este período histórico no tiene nada que ver con las condiciones que estamos viviendo en el momento actual.

Por ello, no podemos decir que el cerebro nos manipule, sino que está utilizando estructuras que se crearon para otras circunstancias y que nosotros nos estamos empeñando en utilizarlas para tomar decisiones económicas.

Las emociones no son necesariamente malas, sino que son respuestas automáticas que nos llevan a una u otra decisión y que tuvieron hace muchos años un claro significado que aumentaba nuestra capacidad de sobrevivir. Sin embargo, en la sociedad actual, la mayoría de ellas nos lleva a tomar decisiones erróneas.

- Uno de los capítulos de su libro se titula "¿Y si Lehman Brothers hubiese sido Lehman Sisters? Diferencias sexuales en las inversiones". ¿Por qué las decisiones que toma un hombre a la hora de invertir son diferentes a las que toma una mujer?

Los varones toman decisiones más arriesgadas, ya que la percepción del riesgo está directamente relacionada con la testosterona, una hormona propiamente masculina, aunque también está presente en las mujeres en menor concentración.

Al variar esta percepción del riesgo los varones tienden a entrar y salir más veces del mercado, ser más arriesgados, utilizar derivados y mayor apalancamiento. Las mujeres suelen pensarse las cosas más veces antes de realizar una operación bursátil y por lo general obtienen mayores beneficios a largo plazo.

- ¿Podría enumerar los errores más comunes que se comenten a la hora de invertir?

Existen muchos, aunque uno de los más comunes es el llamado "efecto manada". Consiste en la tendencia que tenemos los seres humanos a hacer lo que hacen los demás. El error de familiaridad, por el que tendemos a invertir y a valorar de forma más positiva aquellas acciones y empresas que conocemos o que pertenecen a nuestro entorno.

Por otro lado, está la aversión a la pérdida que nos impide asumir pérdidas, motivo por el que preferimos quedarnos muchos años con una inversión antes que materializar unas pérdidas leves.

- "Si piensas que después de la serie 1, 2, 3, 4...viene el 5, no inviertas en el mercado de valores". Este es uno de los subtítulos que aparece en otro de los capítulos del libro, ¿por qué hace esta afirmación?

Porque las cosas habitualmente no son como pensamos. Nuestro cerebro está constantemente creando patrones para intentar predecir el futuro y, si las cosas no suceden como previamente habíamos pensado, tendremos una sobrerreacción que, en el mercado de valores, puede ser muy peligrosa.

Habitualmente estamos acostumbrados a grandes subidas o bajadas de las cotizaciones de las empresas cuando anuncian resultados que los analistas no esperaban. El motivo de esto es que nuestro cerebro está preparado para tomar decisiones muy bruscas cuando las cosas no son como creíamos que iban a ser.


- El cerebro está evolutivamente desarrollado para garantizar la supervivencia de los individuos, no para enfrentarse a la economía, según indica en su libro. ¿Por qué cree que este hecho lleva a cometer errores en la toma de decisiones financieras?

Simplemente porque no estamos preparados para enfrentarnos a la economía. Nuestro cerebro se ha desarrollado con el único motivo de garantizar nuestra supervivencia y por ello tendemos a seguir a los demás, le damos más importancia a lo familiar o nos pone nerviosos el color rojo.

Sin embargo, si hace miles de años seguir a los demás sin pensar el porqué nos podía salvar la vida (quizás estuviesen huyendo de un depredador), hoy día comprar un inmueble simplemente porque lo hacen los demás puede hacer que compremos en los momentos más altos de la burbuja. Las estructuras cerebrales son las mismas, pero las condiciones han cambiado.

- ¿Con qué objetivo ha escrito este libro? ¿Cómo puede ayudar a sus lectores?

Me gustaría que los lectores conociesen cómo su cerebro toma las decisiones de inversión y se beneficien de ello. Hoy día la neuroeconomía está comenzando a hacerse un hueco en el ámbito de la inversión y mi objetivo es ponerlo a disposición de quien quiera saber algo más de esta interesante rama de la neurociencia, de un modo fácilmente comprensible por todos.

- Por último, esta semana se está celebrando la Feria del Libro en Madrid, ¿considera que este evento ayuda a los escritores a dar a conocer sus libros? ¿realmente sacan un beneficio (ya sea económico o no) o se sigue realizando más por tradición, ya que con esta son 74 ediciones de esta feria?

No creo que estar en la feria del libro lleve un gran beneficio económico asociado. Sin embargo sí que es una bonita oportunidad para conocer a aquellas personas que tienen intereses comunes y que leerán tu libro.

Sin duda es un placer saber que las personas que adquieren tu libro te estarán leyendo, compartirás con ellos unas horas de su vida a través de la lectura de tu obra y que, de algún modo, les estás ayudando a adquirir nuevos conocimientos.

Por ello no puedo sino despedirme invitando a todos aquellos que lo deseen a que nos conozcamos en la feria del libro.