Actualizado 05/03/2009 12:26

Evangelina Sánchez, profesora del ISEAD: "Las microfinanzas son la solución a la pobreza pero sí la vía de despegue"

Evangelina Sánchez Lombardía, responsable del Área de Servicios Académicos de la Escuela de Negocios ISEAD, analiza la situación actual y el papel de las microfinanzas para superar el actual momento de crisis económica mundial.

.- ¿Son las microfinanzas un agente de cambio global?

El sistema financiero, tal y como lo hemos conocido, está en crisis. Quizá le ha llegado el tiempo de la renovación para mejorarse, y quizá en las nuevas fórmulas esté la solución. Una de las nuevas fórmulas son las microfinanzas. Nacidas fuera del sistema, han supuesto una revolución dentro del mismo. Se ofrecen créditos sin aval, y el dinero retorna y además con rentabilidad, se presta a los "desbancarizados" y ellos comienzan a formar parte del sistema. Una idea rentable, la creación de un sistema financiero alternativo, la creación de un "banco" merece un premio Nobel de la Paz. ¿No es el mundo al revés?

.- Pero, ¿qué son las microfinanzas?

Las microfinanzas, o su paso más avanzado, los sistemas financieros inclusivos, suministran servicios financieros básicos a grupos vulnerables desbancarizados: servicios de préstamo (los microcréditos), servicios de ahorro (porque los pobres también pueden ahorrar), servicios de seguros (pensiones, salud, agrarios), servicios de transferencias.

Las microfinanzas no son nuevas, pero en los últimos 30 años se han institucionalizado, han creado metodologías de crédito propias y originales, han demostrado ser sostenibles y ser capaces de ser independientes de los fondos de donantes, y han llegado a los gobiernos como demandantes de legislación y estructuras.

.- Y todo esto, ¿para qué?

Se ha demostrado que los microcréditos ayudan a los hogares a salir de la pobreza ya que el acceso a las microfinanzas permite poner en marcha ideas de negocio rentables que llevan a los hogares a fortalecer su estabilidad económica, planificar su futuro, invertir en la nutrición y la escolaridad de sus hijos, o cuidar más su salud (muchas veces ayudados por los microseguros y las actividades formativas de las microfinancieras), sentando las bases para que la siguiente generación tenga una mayor formación y pueda alcanzar un nivel de trabajo más cualificado, creando "círculos virtuosos" de riqueza, que les permite alcanzar otro nivel de vida.

También la comunidad entra en este círculo: la consolidación de las microempresas promueve la creación de empleo, e incorpora al mundo laboral a personas desfavorecidas. La idea puede asimismo ser reproducida por otros, repitiendo el proceso con las mismas consecuencias.

Además, ayudan a mejorar la situación de la mujer, permitiéndole participar en la sostenibilidad financiera del hogar, (e incluso liderarla, no en vano la mayoría de los clientes de las MF son mujeres) y otorgándole una capacidad de decisión en la familia y la comunidad de la que antes carecía.

Y todo esto no tiene por qué ser en el conocido como "tercer mundo": En países desarrollados pueden ayudar a grupos desfavorecidos (inmigrantes, parados y grupos con pocos recursos formativos) a iniciar su propio negocio, consiguiendo unos créditos para los que hasta ahora les pedían garantías reales de las que no disponían.

.- ¿Son las microfinanzas la solución a la pobreza?

No podemos pensar que las microfinanzas son "la solución" a la pobreza. Pero sí pueden ser la vía de despegue para muchos de los microempresarios que demandan sus servicios, y que están dispuestos a pagar las tasas de interés solicitadas y que devuelven todo el préstamo para garantizarse una continuidad en la financiación que les permita seguir invirtiendo en su negocio.