Actualizado 25/03/2009 13:45

El ministro del Interior saudí afirma que "no hay necesidad" de incluir a mujeres en el Parlamento

Mujeres de Arabia Saudí
EP/Comunidad de Madrid

RIAD, 25 Mar. (Reuters/EP) -

El ministro del Interior de Arabia Saudí, el príncipe Nayef bin Abd al Aziz Al Saud, considera que "no hay necesidad" de incluir a mujeres en el Parlamento y que el nombramiento directa de los cargos garantiza que los elegidos sean siempre "los mejores", algo que no sucedería si se hiciese a través de elecciones.

"El nombramiento de los miembros (del Parlamento) garantiza que los elegidos sean siempre los mejores", escribe el ministro en un artículo publicado por el diario 'Al Jazirah'. "Si se hiciera a través de elecciones, es posible que los miembros no sean competentes", prosiguió. Respecto a la llegada de mujeres al Parlamento, el príncipe es contundente: "No veo la necesidad de ello".

En Arabia Saudí no están permitidos los partidos políticos. Los sectores reformistas esperan que el Consejo de la 'Shura', formado íntegramente por hombres nombrados por el Rey, se convierta en el futuro en un órgano legislativo elegido. Fuentes diplomáticas han indicado que en el seno de la familia real hay divisiones respecto a las reformas. El príncipe Nayef, hermano del Rey Abdulá, es uno de los más firmes detractores.

Los hombres tuvieron derecho a votar en 2005 para cubrir algunos puestos en los concejos municipales. Aparte, el Rey ha prometido algunas reformas, en parte para contrarrestar a los sectores más radicales wahhabíes. Quince de los 19 autores de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos pertenecían a esta corriente islámica dominante en Arabia Saudí.

El pasado mes de febrero, el Rey rompió con la tradición eligiendo a una mujer para el cargo de viceministra de Educación. La familia real tiene estrechas relaciones con el poderoso clero saudí, que vigila el debido cumplimiento de la ley islámica (la 'sharia'). Los clérigos opinan que las mujeres deben cubrir su rostro en público e intentan evitar que se mezclen con los hombres que no sean de su familia. Las mujeres no pueden conducir.