MADRID, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
El consumo de las familias españolas se redujo en 2013 un 2,34 por ciento, mientras que en las familias con nacionalidad extranjera el recorte alcanzó el 13,04%, según un estudio de EAE Business School sobre los hogares inmigrantes en España.
El trabajo, difundido este lunes, analiza la situación del 10,15 por ciento de las familias que viven en España, 1,8 millones de hogares frente a un total de 18,2 millones que tienen como sustentador principal a una persona de nacionalidad extranjera.
Según explica, el consumo de los hogares en España fue de 493.514 millones de euros en 2013, un 3,07% menos que el año anterior. De este consumo, el 7,21% corresponde a familias extranjeras: 35.600 millones de euros que suponen una caída del 13,04% respecto del gasto realizado un año antes. Entre los españoles, la reducción fue del 2,34%.
Atendiendo al consumo medio por hogar, el estudio indica que las familias cuyo sustentador principal es extranjero gastan un 22,7 por ciento menos que las españolas. De media, el gasto por hogar se sitúa en 27.097 euros al año, 27.757 entre los nacionales y 21.473 en los foráneos. No en vano, el 84% de estas familias tiene problemas para llegar a fin de mes, un 20% más que las españolas.
También hay divergencias, en consecuencia, en el gasto medio por persona. Cada ciudadano desembolsó 10.694 euros en 2013, un 2,7% menos que en el año anterior. Los españoles se deharon 11.175 euros (un 2,38% menos) y los extranjeros, 7.473 euros (un 8,24% menos que en 2012).
Los gastos son más o menos los mismos. En todas las familias, las cuatro partidas de mayor relevancia son en ambos casos, la vivienda y sus recibos (33% del presupuesto familiar), alimentos y bebidas no alcohólicas (15%), transportes (11,5%) y gasto en hoteles, cafés y restaurantes (31%). En el caso de los inmigrantes, el 32% se va a vivienda, el 15,7% a alimentos, el 13% a transportes y el 8,55%, a restaurantes.
Sobre vivienda, el estudio añade que mientras en ocho de cada diez hogares españoles la opción es la compra, entre los extranjeros de países de la Unión Europea la proporción de propietarios cae al 41% y, entre los nacidos en otros lugares del mundo se reduce hasta el 22%. El resto, en todos los casos, opta por el alquiler
Destaca asimismo que en estas casas cada vez viven menos personas, pues mientras los hogares españoles crecieron un 2,94 por ciento entre 2012 y 2013 y ya tienen de media 2,59 miembros, los de inmigrantes se han reducido un 18% en el mismo periodo: en 2012 se calculaban 2,81 personas por familia y en 2013 eran 2,30, invirtiéndose así la tendencia.
En 2013 el volumen de familias extranjeras se incrementó un 2,58 por ciento mientras las sustentadas por españoles se incrementaron en el mismo periodo un 0,48.
