Actualizado 22/07/2014 14:25

Ingenieros de Montes piden extremar la prudencia por el fuego

Carlos Del Álamo y José Ramón Peribañez
Foto: EUROPA PRESS

MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -

   El Colegio de Ingenieros de Montes ha reclamado a la sociedad que tenga conciencia del riesgo de que en esta época se produzcan incendios forestales, por lo que pide que se "destierre el uso del fuego" en esta época y extremar la prudencia para evitar "mucho dolor" y "cuantiosos daños".

   Según ha recordado el decano del Colegio de Ingenieros de Montes, Carlos del Álamo, el 95 por ciento de los fuegos son provocados y el 5 por ciento tienen un origen natural y ha añadido que, entre los provocados, más de la mitad se debe a negligencias o descuidos.

   Del Álamo ha indicado que en este momento de sequía "importante" en el Mediterráneo el riesgo en la mitad oriental peninsular es elevado pero, en todo caso, ha insistido en que España no se puede permitir "generar riesgos que deriven en incendios por ignorancia o irresponsabilidad".

   Respecto a las penas de este delito, ha reconocido que a pesar de que las sanciones pueden ser de cárcel, es necesario probar la autoría y las causas u origen del fuego y cree que la modificación en el Código Penal, por el que este delito no será juzgado mediante jurado popular será positiva porque el jurado no ha sido bueno ni lo más efectivo para llegar a un fallo justo. Al mismo tiempo, opina que incrementar las penas o prohibirlo "todo" no es la solución.

   En cuanto a los medios de extinción, ha reconocido el "gran avance" que se ha producido en esta cuestión en los últimos 10 o 15 años en España en los que se ha ganado en eficiencia y eficacia, igual que en la concienciación social y en la prevención, lo que ha permitido que el 70 por ciento de los incendios se quede en conatos. Por ello, ha destacado que los medios de extinción también hacen tareas de prevención, en tanto en cuanto, se consigue que los fuegos, en un alto porcentaje no superen la hectárea de superficie afectada.

   De hecho ha comparado la prevención y la extinción con la medicina preventiva y los hospitales y ha explicado que no solo no son incompatibles sino complementarias. "La sociedad debe ser consciente de los avances (...) en este trabajo difícil e incómodo", ha manifestado.

   Por su parte, el ingeniero de montes José Ramón Peribáñez, ha explicado que en la Comunidad de Madrid, donde desarrolla sus tareas en extinción, se ha ganado en prontitud en la llegada al fuego, lo que supone de gran ayuda, pero ha destacado la elevada peligrosidad de las zonas urbano-forestales, es decir, las urbanizaciones arboladas, donde las tareas de extinción adquieren una mayor complicación ya que, hay que priorizar la salvaguarda de las personas y los bienes al mero hecho de apagar las llamas.

   En este contexto, ha denunciado que muchos  municipios no tienen, o no tienen desarrollados planes de emergencia municipales, a los que están obligados por la Ley de Protección Civil de 1985. "Esto planes ayudarían en la evacuación y en saber cómo afrontar la extinción", ha comentado.

   A su juicio, cada vez está más cercano el peligro de incendio forestal "a otros peligros", como por ejemplo una industria química o una vivienda. Por eso, ha indicado que cada incendio es un mundo en el que debe haber una estrategia y una serie de herramientas y medios y ha insistido en que el monte no tiene la culpa, sino que esta es de las personas.

APROVECHAR LA BIOMASA, UNA DE LAS SOLUCIONES

   En este ámbito, el decano de los ingenieros de montes ha recordado que en España hay más de 26 millones de hectáreas forestales y se estima que dos tercios de la madera que crece cada año se queda en el monte sin ningún tipo de aprovechamiento.

   "Con la acumulación de madera en el monte, si no se le da salida, al final acaba ardiendo", ha advertido Del Álamo, que ha elogiado las ventajas de la biomasa, del que ha dicho que se debería incentivar el uso de esta energía que es "la más renovable", "la que más empleos crea por kilowatio" y la que "más posibilidades de crecimiento tiene", al tiempo que ha subrayado que Galicia es una de las que mayor potencial tiene en su uso que, además, contribuye a reducir la dependencia energética.

   Finalmente, se ha referido a los cambios previstos en la Ley de Montes, que se dirigirán, según ha adelantado la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, a fomentar el asociacionismo forestal. Así, ha dicho que fortalecer esta cuestión es muy importante, pero ha añadido que al mismo tiempo es necesario cambiar la fiscalidad, que ahora es más ventajosa a nivel individual o minifundios que mediante el asociacionismo o sociedades de propietarios de montes.