MADRID, 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
El 34% de las mujeres atendidas por Cruz Roja en el marco del programa de inserción 'Incorpora' que promueve Obra Social "la Caixa" consiguieron un empleo el año pasado, según los datos ofrecidos por el director del área de integración social de la Fundación, Marc Simón; y el coordinador general de la institución humanitaria en España, Antoni Bruel.
'Incorpora' es una iniciativa de la Obra Social "la Caixa" nacida en 2007 que se desarrolla en red con 370 entidades sociales de toda España y otra tantas empresas que aspira a la integración sociolaboral de personas en situación de dificultad o riesgo de exclusión, como las mujeres víctimas de violencia de género. A lo largo del año pasado se beneficiaron de este programa más de 42.000 personas y en torno a 10.500 consiguieron un empleo.
En lo que respecta a la parte del programa que se desarrolla en colaboración con Cruz Roja Española, el año pasado fueron atendidas 1.862 mujeres de las que 590 eran o habían sido víctimas de violencia machista. En total, 813 consiguieron insertarse en el mercado laboral (263 de ellas habían sufrido violencia de género).
Además, 331 recibieron atención psicosocial en el programa Tolerancia Cero, que también desarrolla Cruz Roja con Obra Social "la Caixa" y el 40% de ellas fueron después derivadas a 'Incorpora' para la búsqueda de empleo, conforme los datos ofrecidos por Simón, quien ha destacado que se trata de un programa "contracíclico", porque aunque la situación de paro ha empeorado en España, cada vez consigue más inserciones laborales.
Bruel ha destacado que esto supone una tasa de inserción del 34% que es de destacar "con la que está cayendo" y que resulta mayor que la de los programas de empleo de Cruz Roja, estimada en un 29%. El éxito, en su opinión, se basa en la "alianza de las organizaciones" y en la "visión amplia" que tienen de lo que se debe hacer, ya que no se trata de una acción puntual, sino de recuperar a una persona que quizá se encuentra sin autoestima, ofrecerle formación y, después, favorecer una intermediación con una empresa.
El objetivo, según ha dicho, es intentar que todas las personas puedan tener el mismo punto de partida en la carrera por el empleo ya que "las mujeres de por sí ya se encuentran más alejadas de un puesto de trabajo y si se le suma la crisis y una situación de especial vulnerabilidad, cada vez están más lejos de la salida y tienen que correr más y más rápido". En ellas, sin embargo, "se da un mayor compromiso" y por eso la tasa de éxito es mayor.
LAS EMPRESAS "TIENDEN LA MANO"
Por su parte, Simón ha destacado que son más de 470 las empresas que participan en 'Incorpora' y que contratan a estas mujeres. Asimismo, ha puesto el acento en que si bien "la independencia económica es vital para la inclusión", los beneficiarios de 'Incorpora' se desarrollan también en otros aspectos: el 89% amplió su círculo de amistades al acceder a un empleo y la mayoría, "especialmente las mujeres", destacó haber ganado en capacidad de decisión en casa "por estar aportando ingresos".
Además, en su opinión, apoyar programas de inserción laboral "es lo más rentable" ya que se estima un retorno de ocho euros por cada uno que se invierte en que una persona encuentre trabajo, entre lo que cotiza, lo que gasta, los subsidios que deja de recibir y lo que aporta a la sociedad, en general, por tener un sueldo.
De las 1.862 mujeres atendidas en 2012 en situación de vulnerabilidad, el 85 por ciento tenía entre 25 y 45 años de edad y el 62 por ciento eran españolas. El programa ofrece un plan personalizado de cara a las capacidades que tenga o pueda adquirir la mujer, para quien se buscan las mejores opciones. Además, se le facilita acompañamiento y orientación durante todo el proceso de búsqueda y formación y también una vez se ha incorporado a la empresa.
Aunque en la mayoría de los casos se orienta al empleo en el sector servicios, surgen oportunidades distintas y se aprovechan, como fue el caso de Josefa, que fue instruida como monitora de fitness y actualmente tiene trabajo estable en uno de los gimnasios de la cadena Curves. Según ha explicado, se encontraba en una situación de dificultad cuando conoció Cruz Roja, hace año y medio, y, según ha dicho, el proyecto le ha cambiado la vida.
"Antes sólo tenía trabajos eventuales por la vida que llevaba. Estás en una burbuja y no ves más allá. Ellos te enseñan a verlo todo de otra manera", ha añadido. En esta línea, Nuria, otra de las beneficiarias que han expuesto su experiencia y que conoció a Cruz Roja porque requirió un dispositivo de teleasistencia por violencia de género, ha destacado que el programa consiguió devolverle la autoestima.
"Siempre están ahí dándote ánimos y haciendo que te valores, porque si no lo haces no vas a conseguirlo, y que te incorpores con un empleo, porque sin empleo no puedes hacerlo. Te hacen un seguimiento siempre", ha destacado esta mujer, que ha puesto el acento además, en las empresas como en la que ella ha encontrado trabajo (Aqualia, de FCC), que "tienden su mano a mujeres que no tienen nada". "Yo no tenía nada, era un cero", ha apostillado.
