Actualizado 09/05/2008 20:47

CEAR denuncia que la nueva Ley de Extranjería podría tener a una persona encerrada hasta cuatro meses si pide asilo


MADRID, 9 May. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) denunció hoy que la reforma de la Ley de Extranjería que persigue el Gobierno "tiene un claro fin disuasorio" para los solicitantes de asilo porque podría amparar que una persona estuviera hasta cuatro meses en privación de libertad, sin haber cometido ningún delito, en espera de resolución de su expediente.

En la actualidad, una persona sólo puede permanecer en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) un máximo de 40 días, al cabo de los cuales, si no ha podido ser repatriado, es puesto en libertad. Con la reforma de la ley anunciada por el Gobierno, CEAR teme que el plazo pudiera extenderse hasta los 60 días, después de los cuales el inmigrante tendría que ser liberado.

El problema, según la organización, surge cuando esa persona solicita asilo, un trámite que tarda en resolverse en torno a dos meses. En la actualidad, aunque el expediente no haya sido resuelto a favor o en contra, pasados 40 días el inmigrante abandona el centro, pero con la modificación de la ley que contempla el programa electoral del Partido Socialista, no será así, porque se suspenderá el plazo máximo de internamiento en el momento en que el extranjero curse la solicitud.

CEAR pon el ejemplo de un inmigrante que haya solicitado asilo después de 30 días de internamiento. En este caso, deberá esperar 60 días para la resolución de su expediente y en el caso de que no se le conceda el estatus de refugiado, retomaría el cómputo de su internamiento, es decir, los 30 días restantes. Todo ello sumaría un total de 120 días en el CIE.

EFECTO DISUASORIO "INJUSTIFICADO"

Según declaró a Europa Press el presidente de CEAR, Ignacio Díez de Aguilar, esta medida tiene "un claro fin disuasorio" para los posibles solicitantes de asilo, que verán como "consecuencia inmediata" a su petición, "que el internamiento se pueda prolongar otros sesenta días".

"Va a disuadir a mucha gente que probablemente tiene derecho a recibir asilo", explicó Díez, para quien se trata de una medida "desproporcionada" ya que en España "no existe un abuso en la petición se asilo y el número de solicitudes es el menor de Europa". La medida es desproporcionada y lo que va a ocurrir.

En España se tramitan de media cada año unas 5.500 peticiones de asilo, de las cuales se autoriza en torno al diez por ciento, según cifras de la Dirección General de Política Interior.