Publicado 20/10/2016 16:12

Jóvenes e Inclusión pide ampliar la protección a menores tutelados hasta los 25 años para facilitar su emancipación

MADRID, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -

La organización Jóvenes e Inclusión ha reclamado que se amplíe la protección de los menores tutelados o extutelados por la administración hasta los 25 años, dadas las dificultades que experimentan los jóvenes para emanciparse incluso en aquellas franjas de población que no se encuentran en situación o riesgo de exclusión social.

"Mientras la edad media de emancipación en España se sitúa en los 29 años, los y las jóvenes tutelados deben salir al mundo nada más cumplir la mayoría de edad. Y deben afrontar el vértigo de emanciparse sin el apoyo que da una familia", recuerdan desde la organización.

Jóvenes e Inclusión ha presentado en el Instituto de la Juventud (INJUVE), el estudio 'Jóvenes que construyen futuros: de la exclusión a la inclusión social' (elaborado con la colaboración de cuatro universidades) en el que pone de relieve la situación de desamparo a la que se ven abocados estos jóvenes una vez cumplen la mayoría de edad y dejan de recibir respaldo por parte de las administraciones sin tener familia o amigos a los que acudir.

"Casi la mitad (el 46,9%) de estos jóvenes realizan el salto a la vida independiente en situación de precariedad --asegura la organización a partir de los resultados de la investigación--. La juventud española de entre 16 y 29 años constituye la franja de población con mayor riesgo de pobreza y exclusión: la tasa ha aumentado hasta el 38,2% en 20151, casi dos puntos más que en el año anterior. Dentro de esta franja, la juventud tutelada y extutelada presenta una vulnerabilidad aún mayor".

Durante la presentación del estudio cinco jóvenes en esta situación han contado su testimonio y han puesto de manifiesto, entre otros problema, la falta de "amigos a los que pedir ayuda" por tener solamente "educadores o compañeros" o la dificultad para acceder a un trabajo capaz de dotarles de autonomía una vez dejan de recibir protección, teniendo en cuenta la prohibición de trabajar antes de los 16 años y la actual situación del mercado laboral. "Mi vida ha sido una mierda. Todos nuestros recuerdos son malos", han expuesto algunos de ellos.

Además, el informe destaca que más de la mitad de los chicos y chicas que viven en centros residenciales de protección no han logrado el título de la ESO al cumplir la mayoría de edad, lo que dificulta su posterior integración laboral y que este porcentaje alcanza al 75% de estos jóvenes en regiones como Madrid o Galicia, lo que implica un "serio aumento del riesgo de pobreza y exclusión en su vida futura".

Por ello, la organización reivindica ampliar en siete años la protección a estos jóvenes desde los 18 años que actualmente garantizan algunas comunidades autónomas (otras han ampliado la edad algunos años más allá de la mayoría de edad) de forma que estos tengan mayores oportunidades para salir adelante y ser independientes.

De hecho, denuncia que la cobertura que recibe un chico o chica en esta situación "no puede ser distinto en Cantabria, Madrid o Andalucía", por lo que reclama un marco legal común para la protección de estos jóvenes y una normativa común para todas las comunidades autónomas.

Asimismo, incide en la importancia de desarrollar "buenos programas de apoyo a la emancipación" para garantizar la "igualdad real de oportunidades" de estos jóvenes respecto de aquellos otros que sí tienen apoyo familiar. También considera "imprescindible" frenar el abandono escolar prematuro de los jóvenes tutelados mediante políticas educativas específicas y fomentar en España una "cultura de comunidades inclusivas" para que estos jóvenes encuentren redes de apoyo en sus barrios, escuelas, servicios sociosanitarios, mentores voluntarios e incluso en las empresas implicadas en el desarrollo local.