Actualizado 10/12/2014 11:02

3.419 migrantes fallecieron en 2014 intentando cruzar el Mediterráneo

Una de las dos pateras llegadas a la costa gaditana este jueves
Foto: EUROPA PRESS/SALVAMENTO MARÍTIMO

MADRID, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -

   El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha cifrado este miércoles en 3.419 el número de muertos intentando cruzar el Mediterráneo en lo que va de 2014, de un total de 4.272 fallecidos a nivel global, afirmando además que un total de 348.000 personas han arriesgado sus vidas en los mares y océanos del mundo con el objetivo de migrar o buscar asilo en otros países.

   El organismo ha advertido de que la comunidad internacional está dejando de lado su objetivo de salvar vidas en medio de la confusión entre los países costeros y los bloques regionales respecto a cómo reaccionar ante el creciente número de personas que hacen este tipo de viajes.

   En este sentido, el director de la agencia, Antonio Guterres, ha lamentado que algunos países se hayan centrado en evitar la llegada de extranjeros a su territorio, poniendo este objetivo por encima de su obligación de conceder asilo a estas personas.

   "Estos es un error un una reacción equivocada en un momento en el que un número récord de personas están huyendo de guerras. La seguridad y la gestión migratoria son preocupaciones para cualquier país, pero las políticas han de ser diseñadas para que las vidas humanas no acaben siendo un daño colateral", ha valorado.

   ACNUR ha detallado que Europa ha hecho frente al mayor número de llegadas de personas por mar del mundo debido a la existencia de conflictos en su frontera sur (Libia), este (Ucrania) y sureste (Siria e Irak). En total, más de 207.000 personas han cruzado el Mediterráneo en enero, tres veces más que el anterior tope de 70.000 en 2011. Ciudadanos de países como Siria y Eritrea han supuesto cerca del 50 por ciento de estos flujos migratorios.

   Por otra parte, un total de 82.680 personas han cruzado el Golfo de Adén y el mar Rojo, principalmente desde Etiopía, Somalia y Yemen, con destino a Arabia Saudí y los países del golfo Pérsico. En estas rutas se ha registrado el fallecimiento de 242 personas.

    En el sureste asiático, 54.000 personas han protagonizado este tipo de viajes, muchos de ellos abandonando Banglaesh y Birmania en dirección a Tailandia, Malasia e Indonesia, rutas en las que se han registrado un total de 540 fallecimientos. Por último, 4.775 personas han realizado estos viajes en los once primeros meses del año en el Caribe, entre las que se han registrado 71 fallecimientos.

   Por ello, Guterres ha destacado que centrarse en los elementos aislados de un problema de naturaleza compleja ha llevado a los gobiernos a no poder hacer frente a los flujos migratorios y a no conseguir evitar la muerte de personas durante las travesías.

   "No se puede parar a una persona que huye para salvar la vida por medios de disuasión sin incrementar aún más los peligros. Hay que hacer frente a las causas, lo que significa analizar por qué la gente huye, qué evita que busquen asilo a través de medios más seguros, y qué se puede hacer para acabar con las redes que se benefician de ello, protegiendo además a las víctimas", ha dicho.

   "Asimismo, significa tener los sistemas adecuados para hacer frente a las llegadas y distinguir a los refugiados de lo que no lo son", ha remachado el director de la agencia.

Leer más acerca de: