Sobre los datos de empleo: "El aumento de afiliados a la Seguridad Social es positivo pero ¿cuántas personas echan horas y no cotizan?"
MADRID, 5 May. (EUROPA PRESS) -
Las organizaciones de la Iglesia en España Cáritas, Conferencia Española de Religiosos (CONFER), Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC), Justicia y Paz, Juventud Estudiante Católica y Juventud Obrera Cristiana (JOC) se han unido para reclamar al Gobierno de España, a la comunidad internacional, empresas y sindicatos "un trabajo digno" para todos los ciudadanos.
Así lo exigen en una declaración conjunta titulada 'Iglesia unida por el trabajo decente' (#IglesiaporelTrabajoDecente) a la que se han adherido cerca de 70 entidades y en la que los firmantes subrayan que "la necesidad de un trabajo decente para todas las personas" debe estar "en la agenda política, las agendas de las entidades sociales, empresariales" y de la Iglesia.
Concretamente, instan a luchar contra las causas del empleo precario, el desempleo juvenil, la falta de derechos laborales que son resultado, a su juicio, "de un sistema económico que pone los beneficios por encima de la persona" y en el que la persona se convierte en "objeto del mercado", según ha indicado el religioso José Luis Saborido, del Área de Justicia y Solidaridad de CONFER.
"No podemos dejar sin respuesta el sufrimiento humano resultante tanto de estructuras injustas como del egoísmo de las personas que da lugar a formas de trabajo precario o mal remunerado, del tráfico de seres humanos y de trabajo forzado", argumentan.
Además, recuerdan que promover un trabajo digno es "esencial para enfrentar la creciente injusticia social y desigualdad" a la que, según apuntan, "España no es ajena" pues tiene "unas tasas de desempleo muy superiores a la media".
"En España, en Europa y en todo el mundo, el acceso a un trabajo decente debe ser una meta prioritaria de las políticas públicas y de las organizaciones sociales, empresariales y sindicales", apuntan al tiempo que piden que se formulen de forma "urgente" un conjunto de objetivos de desarrollo internacionales, unas condiciones de ayuda y unas políticas económicas.
OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE
Precisamente, con este comunicado también quieren ratificar la declaración publicada como resultado de una reunión celebrada el año pasado en Roma entre organizaciones de inspiración católica, autoridades de la Santa Sede y líderes de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en la que pidieron que "el trabajo decente para todas las personas" se coloque explícitamente entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible en la agenda post-2015.
Por el momento, según ha explicado el director de la Oficina de la OIT para España, Joaquín Nieto, se ha conseguido que se integren el trabajo decente y la protección social en los ODS, pasa su aprobación el próximo mes de septiembre en Nueva York.
Además, ha indicado que entre estos nuevos objetivos, el primero es "acabar con la pobreza" y dentro del mismo, se marcan dos metas: Acabar con la pobreza extrema y reducir a la mitad la pobreza relativa en los países desarrollados. De esta forma, según ha señalado Nieto, "España estaría incluida en los ODS".
Nieto ha denunciado que en España existe "un déficit" de "trabajo digno más protección social" y ha recordado algunos datos como que 5.000 millones de habitantes del planeta "no tienen protección social" o que el 12,5% de trabajadores en España son pobres.
MIRADA "CRÍTICA" A LOS DATOS DE EMPLEO
Sobre el aumento del número de afiliados a la Seguridad Social que se desprende de los datos publicados este martes por el Ministerio de Empleo, los responsables de las organizaciones de la Iglesia han hecho una "mirada crítica".
"Los datos positivos son positivos pero ¿nos damos cuenta de la realidad de tantas familias que viven sin trabajo, que no tienen ningún tipo de ingreso? ¿Cuántas personas no están afiliadas a la Seguridad Social? ¿Cuántas están echando horas en nuestro país y no están cotizando por esas horas extraordinarias? Eso es un fraude a toda la sociedad", ha denunciado el vicepresidente de la Comisión General de Justicia y Paz en España, Javier Alonso.
