MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -
Las obras no autorizadas en Finca Cabañeros, en el interior del Parque Nacional, podrían ser legalizadas en el futuro, pese a que han sido calificadas de infracción "muy grave" por el expediente sancionador del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, que propone una multa de 200.001 euros.
Según se deduce del expediente sancionador al que ha tenido acceso Europa Press, Inmobiliaria del Bullaque no había solicitado autorización para un aparcamiento de 1.122 metros cuadrados, con previsión de 16 plazas y una explanada, así como una piscina y una campa para evisceración de piezas caza silvestre (actividad incompatible en Parques Nacionales).
El documento considera "obvio" que iniciar el procedimiento sancionador está "perfectamente justificado" y "debidamente tipificada" porque no existe autorización para ninguna de esas dos obras anexas.
Sin embargo, el expediente añade que se deberá continuar tramitando el procedimiento sancionador; no obstante, apunta que "se tendrán en cuenta las circunstancias concurrentes a los efectos de graduar la responsabilidad y sin perjuicio del otorgamiento de la correspondiente autorización para las dos obras de referencia, si se cumplen los requisitos legales exigibles para ello".
OBRAS ILEGALES CONSIDERADAS "MEJORAS AMBIENTALES"
En el ámbito del procedimiento, un técnico del Organismo Autónomo Parques Nacionales emitió un informe en el que se señala que tanto el aparcamiento como la campa de evisceración suponen "mejoras ambientales con respecto al proyecto original, al ordenar los movimientos de vehículos por los alrededores de la casa, que provocarían la compactación del suelo y la eliminación de la vegetación herbácea y arbustiva".
"Igualmente la presencia de la explanada de evisceración, facilita la manipulación de las reses y recoge adecuadamente los restos generados por las tareas de control veterinario", añade el expediente.
Atendiendo a estas "circunstancias concurrentes", los daños y deterioros producidos y la trascendencia de la actuación sancionadora en el espacio natural protegido, justifica que se proponga la sanción mínima de 200.001 euros por sanción "muy grave" tipificada.
En ningún momento la propuesta de sanción plantea la remoción de las obras ni la restauración del posible daño causado por estas.
La propiedad de la finca presentó una solicitud de la reforma y rehabilitación de la vivienda principal que se concede con una serie de condiciones. Sin embargo, el 10 de noviembre de 2014 la organización SEO/BirdLife denunció que tuvo conocimiento por los medios de comunicación de unas obras realizadas en esa finca que podrían incumplir la Ley de la Red de Parques Nacionales.
Cuatro días más tarde, personal del Parque Nacional de Cabañeros realizó una inspección y levantó acta por obras autorizadas, pero constató obras "en distintas fases de ejecución" de dos obras anexas a la vivienda principal no contempladas en el proyecto de reforma, que son el aparcamiento de 16 plazas y la explanada.
Estas obras motivaron la iniciación de un procedimiento sancionador el 19 de diciembre por infracción "muy grave". Tras la inspección realizada en la finca, los propietarios presentaron una solicitud de autorización de estas obras casi un mes más tarde. En sus alegaciones, la propiedad defendió que estas obra "no causan daño ni deterioran el paisaje, ni incumplen las leyes medioambientales", por lo que pidió el archivo del expediente.
Para el Ministerio, esta solicitud de autorización de Inmobiliaria del Bullaque fue posterior --el 5 de diciembre-- a la constatación en la inspección en la que se constató la construcción de aparcamiento y la explanada para evisceración de piezas de caza silvestre.
"Es obvio que la iniciación del procedimiento sancionador está perfectamente justificada y debidamente tipificada dado que no existe autorización para ninguna de esas dos obras anexas referidas", apunta, al tiempo que subraya que es "obvio" que Inmobiliaria del Bullaque "era conocedora de la obligación" de requerir autorización para estas obras.
A este respecto, el representante de Ecologistas en Acción, Theo Oberhuber, ha lamentado en declaraciones a Europa Press la "política de hechos consumados" de las obras, al tiempo que ha indicado que precisamente muestran como los propietarios de fincas actuaran como si el plazo de prórroga que permite la caza en el Parque Nacional de Cabañeros hasta diciembre de 2022 no fuera a cumplirse nunca.
Por ello, cree que la instalación de la campa para evisceración de caza demuestra "la intención" de mantener la actividad cinegética. A su juicio, llama la atención que en un Parque Nacional se haya permitido una ampliación, no solo una rehabilitación.
"Han consentido algo que no debían haber permitido y ahora no les queda más remedio que poner una sanción muy grave, pero la mínima. Esto demuestra la intencionalidad porque no hay ningún elemento que justifique la mínima sanción", ha subrayado.
Por ello, ha afirmado que las ONG recurrirán esta sanción por insuficiente y que pedirán la restitución a su estado anterior y que se asuman las responsabilidades políticas y administrativas.
Finalmente, ha denunciado que la situación de los Parques Nacionales es "cada vez más desesperada". "Si se pueden matar lobos y construir palacetes, se está poniendo en entredicho la propia figura de parques nacionales", ha sentenciado.
