Actualizado 08/07/2015 15:33

La Red Europea contra la Exclusión pide un plan específico contra la pobreza infantil más allá del fondo extraordinario

MADRID, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN) celebra que el Ministerio de Sanidad haya decidido destinar 17 millones de euros en un fondo extraordinario contra la pobreza infantil, aunque reclama un Pacto de Estado al respecto y un Plan Nacional que aborde de manera integral la erradicación de la pobreza en España.

Según explican, el fondo, aprobado este miércoles en el Consejo Territorial de Servicios Sociales, "es importante como un primer paso, pero es necesario un Pacto Nacional contra la Pobreza Infantil y su materialización en un Plan contra la Pobreza en general" ante hechos como que la tasa de pobreza infantil en España es la segunda más alta de la UE o que los hogares con todos los adultos en paro que tienen niños sumaron 943.000 en 2013.

"Esta cifra habla de la magnitud del problema en relación con otro problema estructural, la falta o fuerte escasez de ingresos familiares, debida al desempleo. Por lo tanto, como medida de acción puntual tiene un valor de actuación ante una grave emergencia, pero es necesario un Plan contra la pobreza para la resolución de la situación causante de la misma", dice la EAPN.

Sobre el fondo en sí, cuyo reparto entre las comunidades autónomas ha generado polémica porque toma como criterio la tasa de pobreza y no la población, la Red advierte que con la eliminación del resto de parámetros la distribución "queda distorsionada" e incide en que un reparto "equitativo" tendría en cuenta tanto la población infantil como su dispersión y la tasa AROPE.

En cuanto al reparto efectivo, considera que a nivel autonómico se debería considerar también la composición del hogar, dado que los monoparentales, las familias numerosas y las que tienen menores en situación de dependencia son las más afectadas tienen las mayores tasas de riesgo de pobreza o exclusión social.

"Consideramos que, del mismo modo que se exige a las entidades sociales, estos fondos tendrían que administrarse de acuerdo con un marco lógico, en el que se identifiquen y persigan objetivos generales y específicos, para potenciar su eficiencia y su eficacia. También para que no se conviertan en un mare magnum de acciones improvisadas, inconexas y dispares", añade esta red de organizaciones.

En este sentido, dice que el acuerdo contiene "directrices claras aunque muy genéricas, para respetar el ámbito competencial, sobre la utilización prioritaria de los fondos", pero "no hay indicadores de resultados" que permitan valorar el impacto de las medidas.

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