Publicado 21/05/2015 18:48

Denuncian la persistencia de controles policiales "racistas" en Madrid

Testimonios en barrios como Lavapiés, Sol y Ciudad Lineal denuncian la presencia de controles ocultos

MADRID, 21 May. (EUROPA PRESS) -

Las Brigadas Vecinales de Observación de Derechos Humanos denuncian que persisten en Madrid los controles policiales de identidad por perfil étnico, unas prácticas que, en su opinión, "constituyen una vulneración de los derechos humanos y de las libertades".

Así lo expresa este colectivo que este jueves ha explicado en rueda de prensa los datos que se recogen en su tercer informe sobre las redadas racistas de las brigadas de observación de los derechos humanos y que denuncian "innumerables" casos en Comunidad de Madrid recogidos durante el periodo que va de noviembre de 2012 a octubre de 2014.

La organización recaba testimonios reales por observación directa o por declaraciones de personas que contactan con ellos a través de las redes sociales y del correo electrónico para denunciar casos personales, cercanos o de los que han sido testigos. Así, la entidad denuncia que se "mantengan" en el tiempo los "controles racistas" que, a su juicio, "obedecen a órdenes del Ministerio del Interior y de las delegación del Gobierno".

Además, critican que estas prácticas se lleven a cabo en espacios públicos (calle o transporte público) y en privados (locutorios, tiendas o discotecas). También critican que la policía haya cambiado de estrategia y haya modificado la forma de realizar los controles. De este modo, aseguran que se "incrementan" los dispositivos "más discretos" frente a los "más espectaculares", motivo por el que se haya registrado un número inferior de denuncias con respecto a otros años.

Así, en el informe se desprende un aumento de identificaciones realizadas por la policía secreta frente a los realizados por policía uniformada y con dispositivos policiales. Estos primeros son "más móviles, más breves y en los que las personas retenidas están menos tiempo expuestas a la vista en la vía pública".

No obstante, señalan que la línea política sigue siendo la misma, "priorizar los discursos basados en la implantación del miedo frente al respeto a los derechos humanos y a las libertades" ya que el trato a las personas es, según destacan, "vejatorio" debido a los cacheos públicos con violencia física y verbal realizados, además, cuando el sujeto pregunta el motivo del control.

Otro de los factores que la organización denuncia son las consecuencias para quienes no tienen autorización de residencia y que califican de "muy graves". Así, critican que a las personas se les limite en sus movimientos que pueden derivar en detención, multa u orden de expulsión, así como el ingreso en un Centro de Internamiento de Extranjeros (CEI) como el de Aluche después de redadas.

Con respecto a los CEI, la organización denuncia que se hagan "maltratos y torturas llegando incluso en algunos casos a la muerte" a través de lo que consideran "homicidios impunes" por no recibir la correcta atención sanitaria.

"El gobierno desoye con total transparencia y democracia las críticas de la sociedad civil y las recomendaciones de instituciones nacionales e internacionales", alegan.

UN MILLÓN DE IDENTIFICACIONES EN 2012

Según los datos que maneja la organización basados en el Anuario Estadístico del Ministerio del Interior del año 2012, se efectuaron más de 7 millones de identificaciones de los cuáles más de 1 millón se registraron en Madrid.

En el documento se recogen "controles racistas, invisibilización y redadas" en barrios madrileños como Sol, Vallecas, Lavapiés, Ciudad Lineal, Usera y Pacífico en donde crece el "seguimiento y acoso" de personas que siguen, en su mayoría, un perfil extranjero con rasgos no europeos y "generalmente" de clase media baja o baja.

También denuncian el trato "degradante" hacia las personas por parte de los agentes, los cuáles, "gozan de impunidad" y generan, en muchos casos, "alarma social", un elemento que tiene que propiciar el contexto y que facilita a los agentes la acción de pedir la documentación.