Actualizado 28/11/2015 12:08

España cree que el acuerdo de la Cumbre del Clima de París está "muy avanzado"

   El secretario de Estado cree que "en la lucha contra el cambio climático todo será poco"

   MADRID, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -

   El secretario de Estado de Medio Ambiente, Pablo Saavedra, cree que el acuerdo para limitar a 2 grados centígrados el aumento de la temperatura global del planeta "está muy avanzado", pero aunque se llegue a un buen acuerdo en la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático de la ONU en París "en la lucha contra el cambio climático todo será poco".

   En una entrevista con Europa Press sobre la COP21, Saavedra ha definido el cambio climático como "uno de los grandes retos" de la humanidad para este siglo, por lo que la Cumbre del Clima que comenzará el próximo lunes en París será "un punto de partida" contra el calentamiento global. A su juicio, por más que sea satisfactorio el acuerdo que se alcance, al día siguiente habrá que seguir trabajando.

   Además, espera que la negociación y el clima de la Cumbre no se vean afectados "ni en positivo ni en negativo" por los atentados de hace dos semanas en la capital francesa.

   Del mismo modo, ha confirmado la participación en la sesión inaugural de la COP21 el próximo lunes del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, en una jornada en la que participarán unos 180 jefes de Estado y de Gobierno.

   Tras la jornada inaugural, las negociación será tomada por los técnicos negociadores de la oficina de cambio climático y, a medida que "se vaya requiriendo" se incorporará el propio Saavedra, probablemente el próximo fin de semana y, los últimos días, la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina.

   "Los responsables del Gobierno en materia de medio ambiente deben estar en cada caso, si las cosas van bien, seguro, y si van mal, con mayor motivo porque es nuestra responsabilidad", ha acotado Saavedra.

OPTIMISMO POR LOS AVANCES SIGNIFICATIVOS

   El secretario de Estado ha confesado que es "optimista" respecto al posible acuerdo y admite que pese a las expectativas que se generan antes de las COP, en la negociación hay "momentos mejores y peores que a veces se tuercen". En todo caso, "no se puede olvidar lo mucho que se ha avanzado y que han cambiado las circunstancias respecto a la Cumbre de Copenhague (2009) y otras".

   De todas formas, opina que "siempre habrá motivos para pensar que se podría haber avanzado más" pero que la situación de partida es diferente a la del Protocolo de Kioto en los '90.

   Por eso, ha asegurado que no hay un plan B antes de la Cumbre porque esto sería tanto como asumir un mal resultado. "Aquí se trata de pelear hasta el último día para obtener el mejor acuerdo posible y después del 11 de diciembre, seguir trabajando para seguir mejorando", ha insistido.

   RETOS DE LA NEGOCIACIÓN

   Según ha recordado, el Protocolo de Kioto fue firmado por 35 países, frente a los 178 países actuales que han presentado contribuciones voluntarias que en total representan al 80 por ciento del planeta y que suponen el 95 por ciento de las emisiones.

   A su juicio, "esto es un avance importantísimo que no tiene vuelta atrás" pero "no es suficiente" porque se debe comprobar que el acuerdo es jurídicamente vinculante y porque las contribuciones llevarán a un aumento de la temperatura de 2,7 grados centígrados y ese objetivo "no es aceptable".

   "Debemos ir más allá y establecer un objetivo de 2 grados centígrados como irrenunciable y creo que seguro tendremos una mención al objetivo de 1,5 grados centígrados. Estoy seguro de que en París se adoptará un acuerdo", ha defendido.

   Sin embargo, ha insistido en que a la Unión Europea y a España no les sirve un acuerdo programático, sino que sea jurídicamente vinculante y que incluya el principio de acuerdo dinámico, es decir, con revisiones periódicas cada cinco años.

   "Afortunadamente casi todos los países están convencidos de que es necesario y decisivo y es muy posible que vayamos incluso a más, de modo que tengamos una revisión de los compromisos presentados antes de 2020, cuando debe entrar en vigor el acuerdo que se adopte", ha confiado.

   El secretario de Estado confía en que hay una "voluntad clara" de conseguir resultados más allá de las dificultades jurídicas más allá de un acuerdo para llegar al objetivo "irrenunciable" de la UE para alcanzar la neutralidad de emisiones a final de siglo y un sistema transparente de rendición de cuentas.

   Sobre la posibilidad de firmar un acuerdo que el presente Gobierno no va a tener que implantar, considera que hay que superar el cortoplacismo en medio ambiente y cambio climático y ha defendido que el Ejecutivo está convencido de que hay decisiones que tomar que afectan no solo a los próximos cuatro años sino que son para los próximos 100 años y las generaciones futuras.

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