Actualizado 11/05/2015 18:25

El Fiscal de Extranjería alerta de compraventa de chicas en España

Prostitución en la calle Robadors, en el barrio del Raval de Barcelona
Foto: EUROPA PRESS

Más de 1.600 personas fueron registradas como víctimas de trata el año pasado, la mayor parte con fines de explotación sexual

   MADRID, 11 May. (EUROPA PRESS) -

   El Fiscal Coordinador de Sala de Extranjería, Joaquín Sánchez-Covisa Villa, considera que "en España se compran y venden chicas" en pleno siglo XXI porque "el proxenetismo en todas sus manifestaciones no está tipificado" y defiende por ello abrir un debate en profundidad sobre la prostitución, alejado de titulares basados en el desconocimiento.

   Sánchez-Covisa se expresaba así en comparecencia ante la Comisión Especial para el Estudio del Trabajo y la Explotación Infantil que se desarrolla en el Senado, donde ha aportado su perspectiva de la lucha contra estos delitos, ha detallado el papel del Ministerio Fiscal y ha aportado datos correspondientes a las intervenciones registradas el año pasado en trata de seres humanos.

   En su opinión, "en España no hay tráfico de seres humanos con fines de extracción de órganos probablemente porque tiene la mejor legislación posible sobre donación de órganos". En esta línea, considera que la persistencia de la trata con fines de explotación sexual tiene que ver con la falta de tipificación del proxenetismo, es decir, de la obtención de lucro a costa del cuerpo de las mujeres.

   "España debería plantearse seriamente el debate sobre la prostitución, no una serie de cosas que han salido en los medios de comunicación. Yo me he quedado asustado al ver algunos titulares porque el que lo ha dicho, no ha ido a un club y no ha visto a una chica atada a un radiador a la que han destrozado porque tenía 16 años y quería escapar de allí", ha comentado.

   El fiscal ha incidido en que "en España se compran y venden chicas" y "se ha llegado a pagar por una chica 750 euros". "Si eso ocurre y existen tantos locales tiene que ver, en mi opinión, y ya llevo en esto varios años, con que en España el proxenetismo en todas sus manifestaciones no está tipificado".

"LO GRAVÍSIMO ES LA COBERTURA SOCIAL"

   Ha recordado que España firmó un convenio contra la trata en 1950 y lo trasladó a su Código Penal, pero acabó derogando esta tipificación en 1995, "legitimando y dando cobertura incluso social" a esta práctica. "Eso es lo gravísimo, que se ha transmitido a la sociedad española que el proxenetismo, tal y como está desarrollado, es una actividad noble y por tanto perfectamente legítima", ha añadido.

   Según afirma, personalmente acepta "que hay mujeres que ejercen la prostitución voluntariamente y como modo de vida" y no lo juzga, pero cuestiona "hasta qué punto hay libertad" en "una mujer de 65 años que cobra ocho euros por una felación y tiene que darle 5 al dueño de un establecimiento, o en otra mujer que ha sido maltratada y abandonada por el marido y la ha dejado con tres hijos y les tiene que dar de comer".

   Sánchez-Covisa incide por ello en la necesidad de "un debate serio y con un rigor profundo sobre el mismo que lleve a trasladar a la legislación española una regulación de la prostitución tal como quiere el derecho internacional" y pone el acento en la importancia de "dar una solución a algunos aspectos como al cliente que en España no están". "A lo mejor hay que ir hacia el cliente y sobre todo, a los institutos, a la formación de nuestros universitarios, de nuestros estudiantes", comenta.

"EN ESPAÑA ESTÁ ASENTADA LA TRATA"

   Mientras, asegura, "se puede afirmar sin temor a equivocarse que, como en años anteriores, en España se confirma que está asentada la trata de seres humanos con fines de explotación sexual a un nivel preocupante, que también hay episodios de trata con fines de explotación laboral y para la mendicidad y que es desconocida la trata con fines de extracción de órganos".

   En total, el año pasado las fuerzas policiales reseñaron a 1.623 víctimas de trata de seres humanos, de las que 1.441 se consideraron explotadas sexualmente, 161 laboralmente y 12 para la mendicidad, conforme los datos que ha facilitado el Fiscal y que formarán parte de la memoria anual que se publicará en 2015.

   Conforme estas cifras, mientras en el ámbito laboral no fue detectado ningún menor de edad, en los atestados de trata para explotación en la mendicidad 8 de las 12 reseñadas eran menores entre 13 y 15 años, todos de nacionalidad rumana y siete de una misma familia "perfectamente organizada".

   Con todo, el mayor número de menores se detectó en el ámbito de la explotación sexual: constan 21 en las que "indiciariamente puede haber éxito y condena en el procedimiento". Diez de ellas eran niñas rumanas, cuatro eran españolas, tres nigerianas, una paraguaya, una dominicana, una rusa y una búlgara.

   Por otra parte, ha hecho referencia a la problemática de los llamados 'niños ancla', bebés que las redes de trata embarcan junto a sus víctimas camino de España para garantizar que haciéndolas pasar por sus madres, se queden en el país. Sánchez-Covisa incide en que estos niños, lactantes en su mayoría, no son como tal víctimas de trata, pero sí de instrumentalización por parte de las redes.

   El año pasado llegaron 145 en cayucos y pateras, aunque aún no se ha esclarecido si eran o no hijos biológicos de las mujeres que les acompañaban. "Esto, denunciado en 2011, se acabó a través de la generalización de pruebas de ADN porque simplemente con la amenaza de hacer una prueba resultó que no tenemos anadie que diga que es la madre salvo que realmente lo sea, que las hay", ha comentado. No obstante, los casos son objeto de seguimiento por parte del Ministerio Fiscal.