Publicado 04/08/2015 18:05

PGE.- Asociaciones de mujeres aplauden el aumento de fondos contra la violencia de género, pero piden políticas de apoyo


MADRID, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas y la Fundación Mujeres han valorado el incremento anunciado por el Gobierno en las partidas para la prevención y lucha contra la violencia de género (1,5 millones de euros más) para 2016.

Sin embargo, se han mostrado convencidas de que, por un lado, "no es suficiente" y de que, por otro, la erradicación de la violencia de género requiere que estos fondos vayan acompañados por un incremento de los recursos para políticas de igualdad, empleo y vivienda social.

"No es suficiente, porque se ha ido rebajando paulatinamente. Lo que yo diría es que se ha dado un frenazo al descenso que se ha ido produciendo año tras año durante estos últimos cuatro años", ha subrayado a Europa Press la presidenta de la Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas, Ana María del Campo.

En este sentido, ha criticado que, a lo largo de la legislatura, hay medidas de prevención que "no se están haciendo" y que "las campañas han desaparecido". Asimismo, ha criticado también que "todavía se escuchan barbaridades como que las denuncias son falsas", lo que a su modo de ver constituye "un intento de desprestigio de la única solución que tiene una mujer que es maltratada: la posibilidad de denunciar y de que se sigan las consecuencias".

"La historia de las mujeres maltratadas es el maltrato que padecen y la desatención que el Gobierno mantiene hacia ellas. Lo que tiene que hacer el Gobierno es invertir en vivienda social --ha reclamado--. Hace cuatro años que no recibimos vivienda social. De nada sirve tratar a las mujeres si, a la hora de salir del recurso, no tienen a dónde ir".

Por todo ello, su valoración de la intención de subir el presupuesto para la lucha contra la violencia de género es que está "bien, porque parece que se han parado a pensarlo" pero "mal, porque lo más esencial que es la vivienda social ni la tocan". "Necesitamos que las mujeres que se han recuperado puedan entrar en el mundo en una vivienda. Falta mucho todavía para estar como hace cinco años", ha concluido.

Por su parte, la presidenta de la Fundación Mujeres, Marisa Soleto, ha explicado que, dada la "necesidad de aumentar los esfuerzos" en materia de prevención de la violencia de género, "cualquier incremento es bienvenido".

Aún así, se ha mostrado prudente y ha explicado que primero "habrá que ver a qué se dedica ese incremento y si puede ir a solventar los principales problemas".

En todo caso, ha señalado que, pese a que se ha producido un incremento en el presupuesto para las acciones en materia de lucha contra la violencia de género, se produce de forma paralela una merma del presupuesto en materia de políticas de igualdad, aunque reconoce que todavía no ha podido analizar la ficha presupuestaria con detenimiento.

"Siempre hemos insistido en que las políticas para la prevención y la erradicación de la violencia de género y las políticas para la igualdad deben ir juntas, en que son inversiones sociales que se retroalimentan", ha explicado.

Por ello, ha asegurado que, en caso de confirmarse la reducción del presupuesto para políticas de igualdad, sería algo que desde la fundación "lamentarían". En este sentido, ha incidido en que, incluso en el actual marco de recuperación económica, "las mujeres se están viendo afectadas".

"Precisamente hoy hemos conocido los datos del paro y estamos viendo reiteradamente cómo el empleo femenino se está viendo especialmente afectado, incluso en el momento de la recuperación, con unas cifras bastante peores que las de los varones", ha señalado.

Soleto ha incidido en que la peor situación laboral de las mujeres y la dependencia económica que ello supone "es uno de los factores de vulnerabilidad" que, a su juicio, "dificultan que las mujeres luego puedan escapar de las situaciones de violencia".

Por esta razón ha incidido en que, aunque "cualquier incremento es bienvenido" la exigencia de la fundación es, por un lado, que "se invierta en lo que hace falta" y, por otro, "que se corrija el déficit en materia de igualdad".