Actualizado 05/12/2014 06:43

Las valoraciones policiales a víctimas de violencia de género en riesgo extremo bajan un 38,08%

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MINISTERIO DE IGUALDAD

El Gobierno no descarta un retraso al segundo semestre de 2015 de la puesta en marcha de los nuevos formularios de valoración de riesgo

MADRID, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -

Las valoraciones policiales a víctimas de violencia de género en riesgo extremo bajaron un 38,08 por ciento de 2013 a 2011, según se desprende de una respuesta parlamentaria del Gobierno dirigida a la diputada del PSOE, Ángeles Álvarez, a la que ha tenido acceso Europa Press.

Así, si en 2011, primer año de legislatura del Gobierno 'popular' el total de valoraciones policiales de riesgo de nivel extremo se situó en 2.917, mientras que en 2013 fueron 1.806 (último año con datos disponibles); lo que supone un descenso del 38,08%.

Sobre las valoraciones policiales del riesgo alto, en 2011 fueron 12.633 y en 2013, un total de 9.079; es decir, se redujeron 28,13%. En cuanto a las valoraciones policiales del riesgo medio, en 2011 ascendieron a 44.634, mientras que en 2013 se hicieron 41.424; lo que supone una reducción de 7,19%.

"El descenso de las valoraciones de riesgo resulta inquietante y sospechoso. El hecho de que hayan bajado precisamente las que requieren de dispositivos para las mujeres, es decir, las valoraciones de nivel extremo y alto, reclaman que Interior haga un seguimiento permantene de la víctima y el victimario", señala Álvarez.

A juicio de la diputada, Interior debería explicar estos datos después de que se haya producido "un recorte de cerca de 7.000 efectivos policiales desde que llegó el PP". "Estos datos ponen de evidencia que Interior no hace todos los esfuerzos para combatir la violencia contra las mujeres", apostilla Álvarez.

Entre otros datos, Interior también señala que, a fecha de 21 de febrero de 2014, hay un total de 624 mujeres víctimas de violencia de género con dispositivo telemático.

Sobre víctimas de menores de edad, en 2010 se realizaron un total de 971 valoraciones, de las que 26 fueron de riesgo extremo; en 2011, de las 1.059 realizadas, 19 eran de riesgo extremo; en cuanto a 2012 el número de valoraciones descendió a 1.041, de las que 19 fueron de riesgo extremo; al mismo tiempo que en 2013 se hicieron un total de 1.059 valoracioens de las que 16 eran de riesgo extremo.

REVISIÓN DE LOS PROTOCOLOS

Según explica el Gobierno, en otra respuesta parlamentaria, para determinar el nivel de riesgo que tiene una víctima de violencia de género a sufrir una nueva agresión, desde julio de 2007, y dentro del sistema Viogen, se están utilizando dos formularios de valoración de riesgo.

Se trata del 'VPR' o 'Valoración policial de riesgo', que permite realizar la estimación inicial del nivel de riesgo, y que se aplica nada más conocerse una actuación violenta contra la víctima o cuando lo estimen oportuno los evaluadores policiales; así como el 'VPER' o 'Valoración Policial de Evolución del Riesgo', que permite estimar la evolución del tiempo.

En este sentido, señala que estos formularios fueron elaborados en su momento por un grupo de trabajo integrado por especialistas de las diferentes instituciones policiales implicadas y contando con el respaldo científico de expertos de tres universidades españolas.

En 2007 salieron a la luz tanto el VPR como el VPER. El VPR volvió a modificarse ese mismo año. Después, en 2008 se modificaron ambos protocolos. Hasta 2010 no se produjo una nueva modificación, en dos ocasiones el VPR y en sólo una el VPER. Es decir, el VPR en apenas tres años (de 2007 a 2010) se ha modificado cinco veces, mientras que el VPER en tres ocasiones.

El Ejecutivo señala en otra respuesta dirigida al PSOE que a lo largo del primer semestre de 2014 se constituyó un nuevo grupo de trabajo en este sentido y ampliándose el número de componentes. Así, y además de los representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de un equipo universitario, se cuenta ya con la participación de representantes de Justicia, Fiscalía, instituciones penitenciarias y Delegación del Gobiern para la Violencia de Género. El PSOE en este punto lamenta que no tenga representación las comunidades autónomas.

El Gobierno asegura que el objetivo de este grupo de trabajo es el de desarrollar un nueva versión de ambos protocolos que permita evaluar el riesgo con la "máxima precisión e inmediatez" que sea posible.

Para ello, indica que entre otras actuaciones se está analizando la posibilidad de incluir algún tipo de indicador relacionado con la detección de situaciones de especial vulnerabilidad y, con el uso de las nuevas tecnologías y redes sociales. Asimismo, dice que se tendrá en consideración la violencia de género que se produce en los entornos escolares y entre parejas "inmaduras".

"Esta nueva versión de los formularios VPR y VPER está previsto que se ponga en explotación, dentro del sistema VIOGEN, a lo largo del primer semestre de 2015, aunque se podría producir algún tipo de retraso debido a la complejidad técnico científica de esta actuación", señala el Ejecutivo.

Además, el Gobierno indica en otra respuesta parlamentaria que tanto el Cuerpo Nacional de Policía, como la Guardia Civil, en sus planes de estudios recogen módulos formativos en materia de violencia de género que, en próximos meses, se revisarán por parte de la Secretaría de Estado de Seguridad. Paralelamente, se va a impulsar también el uso de las nuevas tecnologías para fomentar la formación 'on line' en esta materia.

A su vez, en otra respuesta parlamentaria al PSOE, la asesoría parlamentaria del Ministerio del Interior, señala que a lo largo del último trimestre de 2014 está previsto mantener, entre técnicos del sistema Viogen y técnicos de los sistemas informáticos de Instituciones Penitenciarias, las reuniones que sean precisas para diseñar e implementar los servicios web que permitan intercambiar la información necesaria para poder poner en conocimiento de la víctima (vía SMS) y de los agentes implicados en su seguimiento y protección (vía correo electrónico) los movimientos penitenciarios de los agresores internos en prisión.

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