HUELVA, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Unidad de Aparato Digestivo ha incorporado estos días en su cartera de servicios a la población de Huelva la realización de ecoendoscopias a pacientes con diagnóstico o sospecha de patología oncológica digestiva. Se trata de un nuevo procedimiento diagnóstico y terapéutico de alta complejidad y de bajo riesgo, que permite determinar el estadío en que se encuentran los tumores en el momento del diagnóstico, a la vez que facilita la exploración de lesiones pancreáticas con mayor precisión que los métodos de imagen con los que se contaba hasta el momento.
Esta precisión en la localización, naturaleza y nivel de desarrollo del tumor, que requiere de una alta formación por parte de los profesionales que la realizan, permite afinar de una forma más rigurosa las necesidades de tratamiento que va a requerir el paciente con el fin de determinar el abordaje quirúrgico, por lo que permite mejorar el pronóstico de la enfermedad, evitando además el traslado de estos pacientes a otros hospitales de Andalucía, ha informado la Junta de Andalucía en una nota.
La ultrasonografía endoscópica o ecoendoscopia es un procedimiento que integra la exploración endoscópica convencional con la obtención de imágenes ecográficas de alta precisión del tubo digestivo --esófago, estómago, intestino delgado, colon y recto-- y de los órganos que lo rodean. Al usar una sonda endoscópica que va dotada de un ecógrafo en el extremo, se pueden obtener imágenes mucho más nítidas y una visualización más detallada de las distintas capas que conforman la pared del tubo digestivo.
Este nuevo procedimiento permite además realizar biopsias guiadas de las lesiones identificadas, consiguiendo así el diagnóstico final en la mayoría de ellas y agilizando, de esta forma, todo el proceso de atención al paciente, por lo que se reducen los tiempos de espera, permitiendo la implantación del tratamiento de la forma más rápida posible.
La importancia de esta exactitud diagnóstica radica muy especialmente en la posibilidad de ofrecer al paciente el tratamiento más óptimo para él, puesto que permite diferenciar entre aquellos pacientes que se beneficiarán de tratamientos neoadyuvantes, --quimioterapia y radioterapia-- antes de proceder a la cirugía, de los que requerirán, por el contrario, un abordaje quirúrgico de inicio, lo que repercute finalmente en un mejor pronóstico de la enfermedad.
El mayor conocimiento de la evolución y naturaleza del tumor supone también la posibilidad de evitar la realización de procedimientos quirúrgicos innecesarios en pacientes que se encuentran en estadíos tumorales avanzados o con patología benigna, prescindiendo de aquellos que solo vayan a reportar riesgos para el paciente sin beneficio alguno.
La patología oncológica constituye en la actualidad la indicación más importante de la ecoendoscopia. No obstante, gracias a su espectacular desarrollo en los últimos años, su campo de aplicación tanto diagnóstico como terapéutico es cada vez es mayor, utilizándose en el diagnóstico de tumores próximos al tubo digestivo, como son las lesiones mediastínicas, pulmonares y suprarrenales, y en el tratamiento de las mismas mediante la inyección de determinadas sustancias intralesionales.
La evidencia científica disponible la sitúa como la técnica más precisa en la actualidad para determinar el estadío de los tumores del tubo digestivo y, sobre todo, del área pancreatobiliar.
Su elevada precisión diagnóstica, superior al 90 por ciento de efectividad y la baja tasa de complicaciones que presenta, que apenas ronda el 0,5 por ciento de los casos, generalmente muy leves, ha hecho de esta técnica una herramienta muy potente para la toma de decisiones del especialista en Aparato Digestivo, el cirujano o el propio oncólogo. Supone, por tanto, un gran salto cualitativo en la atención a los pacientes afectados por una enfermedad tan importante como es la oncológica.
Esta nueva incorporación a la cartera de servicios de la Unidad de Aparato Digestivo viene a sumarse al esfuerzo que están realizando sus profesionales, tanto en el abordaje de nuevas pruebas diagnósticas, más complejas y efectivas, como en la reorganización de los circuitos asistenciales y el impulso a las líneas de colaboración con la red de centros de salud de Atención Primaria, con el fin de mejorar todo el proceso de atención al cáncer digestivo, favoreciendo el diagnóstico precoz, clave para la recuperación del paciente.
