Actualizado 23/07/2018 18:34

Anillado un pollo de alimoche nacido en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas

Anillamiento de un pollo de alimoche
JUNTA DE ANDALUCÍA

JAÉN, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -

Técnicos de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio han anillado un pollo de alimoche --una hembra de unos 55 días de vida y de dos kilos de peso-- nacido en libertad en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas, convirtiéndose en el primero en la provincia de Jaén equipado con un emisor GPS.

En concreto, los trabajos de anillamiento han sido realizados por el Equipo de Trabajos Verticales de la Agencia de Medio Ambiente y Agua, perteneciente al Plan de Recuperación y Conservación de Aves Necrófagas, que se encarga también de chequear y tomar muestras tanto biológicas como paramétricas de las crías, según informa la Junta en una nota.

El delegado territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Juan Eugenio Ortega, ha asistido a estas labores, donde ha explicado que, actualmente, en la provincia hay cinco parejas de alimoches, cuatro en Cazorla, Segura y Las Villas y una en Sierra Morena.

"Este año han nacido tres pollos en libertad en Jaén y 18 en toda Andalucía", ha explicado Ortega, que ha indicado que estos ejemplares comienzan a volar en torno a los 75 días de vida. "Al finalizar el verano, dejan el Parque Natural para volar a África, concretamente, a la zona comprendida entre el sur de Mauritania y el norte de Mali, donde pasan los meses de invierno, para volver aproximadamente en el mes de marzo", ha detallado.

El alimoche ('Neophron percnopterus') es la más pequeña de las cuatro rapaces estrictamente carroñeras europeas y una de las más oportunistas en cuanto a su ecología trófica, alimentándose de cualquier tipo de carroña --mamíferos, aves, peces, reptiles y anfibios--, basuras domésticas, excrementos e insectos, en definitiva pequeños trozos, lo cual la hace "muy vulnerable" a los cebos envenenados, la principal causa de mortalidad.

Otras causas que provocan la muerte no natural en esta ave, catalogada en peligro de extinción, son las colisiones con parques eólicos y electrocuciones, a lo que hay que sumar las molestias que se originan durante el periodo de cría, básicamente producidas por el uso público no regulado aunque también por obras forestales, que inciden de manera negativa en el éxito reproductor.

Con el fin de paliar esta situación, la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio desarrolla un programa de actuaciones con el objetivo de variar la delicada situación por la que atraviesa esta rapaz, provocada fundamentalmente por causas antrópicas. Esta estrategia está basada en el control de la población reproductora y en la ejecución de las actuaciones necesarias para conseguir la supervivencia de los individuos, la salvaguarda de sus territorios de cría y una reproducción con éxito.

Asimismo, la Consejería desarrolla desde 2004 la Estrategia Andaluza de lucha contra el veneno asociado al control ilegal de depredadores por parte de algunos cazadores y ganaderos, y en la que destaca la labor de los agentes de Medio Ambiente y del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona).

Desde la Junta destacan que, en los últimos años, se ha conseguido disminuir "sensiblemente" el número de envenenamientos, aunque "todavía representa un factor de riesgo para la viabilidad de las poblaciones de especies como el alimoche o el milano real en Andalucía".