Publicado 22/09/2017 11:39

Hospital Regional de Málaga realiza seguimiento a 450 niños con diabetes tipo 1 y ve un aumento en menores de cinco años

Prueba de la glucosa, diabetes, glucómetro
OMS

Medio centenar de menores con esta enfermedad disfrutan de un campamento que ayuda a favorecer la autonomía del paciente.

MÁLAGA, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -

La Unidad de Endocrinología Infantil de la Unidad de Gestión Clínica de Pediatría del Hospital Regional de Málaga realiza seguimiento a 450 niños con diabetes tipo 1. Al año este tipo de diabetes se manifiesta por primera vez en 40-45 niños, evidenciando un aumento en este número por debajo de los cinco años.

Desde hace más de 25 años, profesionales de esta unidad colaboran con la Asociación de Diabetes de Málaga (Adima) en la organización de campamentos de verano para niños con diabetes. En el último, un total de 46 menores de entre ocho y 14 años han disfrutado del mismo, una cita entre cuyos objetivos está desmedicalizar la enfermedad y favorecer la autonomía del paciente.

Entre los días 2 y 9 de septiembre, los niños --procedentes de Málaga, Córdoba y Jaén-- han participado en la colonia, que se ha celebrado en Cardeña, en el Parque Natural Valle de los Pedroches (Córdoba). Al mismo asistieron siete profesionales, entre los que se encontraban endocrinos, endocrinólogos pediátricos y personal de enfermería.

Desde sus inicios, los endocrinólogos José Luis Pinzón, del Hospital Virgen de la Victoria, y Juan Pedro López Siguero, del Materno Infantil, han coordinado estos campamentos infantiles, que desde hace varias ediciones dirige la endocrinóloga pediátrica del Materno Infantil, Isabel Leiva.

En este sentido, la directora del campamento ha señalado que "la posibilidad de contar en el equipo con estos profesionales establece lazos de unión y fortalece el proceso de transición tan importante en enfermedades crónicas". De este modo, la colonia permite cerrar el círculo entre pacientes, profesionales sanitarios y la asociación Adima.

FORMACIÓN, TÉCNICAS DE INYECCIÓN Y ALIMENTACIÓN

Además de los profesionales de diferentes hospitales públicos, el campamento ha contado con once voluntarios con diabetes que ya habían participado en estas colonias así como un equipo de cinco monitores de tiempo libre. Durante su estancia se ha llevado a cabo un plan de formación en tecnología y nuevas terapias, manejo de hipoglucemia, técnicas de inyección, alimentación y adaptación a situaciones especiales.

Los siete días de campamento han servido a los menores para abordar el contaje de raciones de hidratos de carbono y el ajuste insulínico individualizado en talleres de alimentación. Además, se han organizado actividades deportivas, talleres artesanales y fiestas "con el objetivo de conseguir la diversión a través de la convivencia con otros niños que tienen diabetes así como el acercamiento con su equipo sanitario", ha sostenido Leiva.

Las colonias infantiles tienen entre sus objetivos la adaptación del niño con diabetes a las actividades lúdico-deportivas, el refuerzo formativo en un ámbito extrahospitalario, la intensificación del vínculo con el equipo médico que habitualmente realiza su seguimiento y la posibilidad de compartir experiencias, preocupaciones y deseos.

Otro de los objetivos de estos campamentos es disminuir la carga de los cuidadores principales, muy involucrados en el proceso de afrontamiento de la enfermedad.

El proceso de educación diabetológica se inicia en el centro sanitario en el momento en que los menores debutan con la diabetes, siendo el objetivo primordial lograr la independencia del núcleo familiar --inicialmente, si son pequeños-- y, posteriormente, la independencia y autonomía del menor y adolescente.

Generalmente los menores por encima de los ocho años ya se administran la insulina de forma autónoma. Esta formación ya iniciada en los centros sanitarios se favorece durante su estancia en el campamento y muchos de estos niños consiguen de forma exitosa la autoinyección durante estos días.

Además de profundizar en el bienestar de los pacientes, los campamentos forman parte del proceso formativo de residentes en las especialidades de Pediatría y Endocrinología, tanto a través de sesiones grupales diarias en el análisis del ajuste de la insulina de forma individualizada de cada menor como en sesiones formativas de actualización en manejo de tecnología aplicada a diabetes.

Esta estrategia permite una homogeneización de la asistencia de profesionales de dos servicios diferentes (Endocrinología Pediátrica y Endocrinología de adultos), fomentando un adecuado proceso de transición en la atención de estos pacientes.