Amenaza a una empleada de Lanbide que rechazó su solicitud para la RGI

Actualizado: viernes, 22 febrero 2013 20:02

BILBAO, 22 Feb. (EUROPA PRESS) -

Un individuo ha amenazado este viernes con un arma a una empleada de la oficina que el Servicio Vasco de Empleo-Lanbide tiene en el barrio bilbaíno de Rekalde, tras ser rechazada su solicitud para percibir la renta de garantía de ingresos. El varón ha comenzado a gritar y amenazar a la trabajadora, a quien, abriéndose la chaqueta, ha mostrado un arma corta que llevaba metida en el pantalón.

Tras avisar la empleada al vigilante de seguridad, el sujeto ha huido del lugar. Presentada la correspondiente denuncia, el sospechoso está identificado, pero aún no ha sido localizado, según ha informado el Departamento vasco de Seguridad a Europa Press.

En un comunicado, el sindicato LAB ha manifestado que la situación "insostenible que vive nuestro pueblo, ha convertido en frecuentes estos incidentes en los servicios sociales fundamentales".

"La cruel coyuntura económica empuja a las personas al abismo y, cuando no puede garantizarse lo mínimo para subsistir, ocurren sucesos violentos como estos. Seguramente, dentro de poco, las consecuencias dañinas de alguno de ellos serán irreversibles, y no habrá medida de seguridad que las evite", ha advertido.

La central abertzale ha afirmado que los trabajadores de Lanbide no tienen ninguna responsabilidad en crear la "grave situación económica que nos está estallando entre las manos". "De hecho, están en la primera línea de lucha contra la exclusión social, y tratan de garantizar los derechos fundamentales de la ciudadanía. Y sin embargo se ven sometidos a una gran presión psicológica, que aumenta considerablemente ante este tipo de violencia", ha lamentado.

En este sentido, ha apuntado que "este último suceso tan lamentable deja en evidencia que nuestros compañeros de Lanbide se encuentran también en la primera línea de fuego de los peligros que conlleva dicha exclusión social".

Por último, el sindicato ha expresado su "más sincera e intensa solidaridad" hacia su compañera amenazada, así como hacia sus compañeros de oficina. "Todas y todos nosotros hemos de saber que no podremos hacer frente a la crisis enfrentándonos con otras compañeras o ciudadanas. Las personas que crearon la crisis económica y quienes la están agravando no están en las oficinas de empleo garantizando servicio público a la ciudadanía", ha destacado.