CCOO y UGT abogan por buscar "un frente común" sindical ante la reforma laboral

Unai Sordo (CCOO) Y Dámaso Casado (UGT)
EUROPA PRESS
Actualizado: miércoles, 15 febrero 2012 14:49

Apelan al "sentido común" de Confebask, que no puede "aplaudir con las orejas" si apoya la negociación colectiva en Euskadi

BILBAO, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -

CC.OO. y UGT de Euskadi han abogado por buscar "un frente común", entre el conjunto de los sindicatos, para articular la "respuesta" a la reforma laboral, que es "injusta" para los trabajadores e "ineficaz" para el empleo y puede "empeorar" en la tramitación parlamentaria. Asimismo, han apelado al "sentido común" de Confebask, que no puede "aplaudir con las orejas" la reforma si apoya mantener la negociación colectiva en Euskadi.

Sus secretarios generales, Unai Sordo (CC.OO) y Dámaso Casado (UGT), han ofrecido una rueda de prensa conjunta en Bilbao para presentar las movilizaciones que realizarán este domingo en las tres capitales vascas bajo el lema 'No a la reforma laboral'. Las protestas se realizarán en la plaza de la Virgen Blanca en Vitoria (11.00 horas), en la Gran Vía de Bilbao (12.00 horas) y en Alderdi Eder en San Sebastián (13.00 horas).

Sordo ha llamado a dar una "respuesta contundente" al proyecto del Gobierno de Mariano Rajoy y, en esta línea, ha mostrado su disposición a consensuar con el resto del sindicalismo vasco, especialmente ELA y LAB, "un frente común" y "coordinarnos y buscar puntos de unión" ante la reforma porque "es lo que los trabajadores vascos demandan".

El responsable de CC.OO. ha explicado que aún no se han puesto en contacto con los dos sindicatos nacionalistas, aunque ha resaltado que la responsable de LAB, Ainhoa Etxaide, también ha apelado a buscar "puntos de unión". Aunque cree "razonable" que cada sindicato pueda tener "su proceso de asambleas o de movilización", ha incidido en la importancia de que "vayamos confluyendo teniendo en cuenta que esto puede derivar en una confrontación dura, que puede derivar en la máxima expresión que pueda ser una huelga general".

También Casado ha apelado a "la unidad sindical" porque la "división" perjudica "cada día más" a los trabajadores y de ella "se aprovecha" la patronal. Por ello, ha esperado que, aunque para las primeras movilizaciones no será posible un acuerdo, se dé "un giro" y que "todo lo que podamos hacer lo hagamos conjuntamente" en el futuro.

El dirigente de UGT en Euskadi ha afirmado que, si la sociedad en general está "cabreada" con la reforma, "les abrimos la puerta para estar en la calle y protestar todos" y ha defendido que, "si hacemos una movilización muy fuerte y damos una imagen dura a este Gobierno, posiblemente en el Parlamento igual se para algo".

"Si no, nos recortarán mucho más", ha asegurado Dámaso Casado, que ha dicho temer que las enmiendas que se presenten en el trámite parlamentario puedan ser "mucho peores" aún ya que no se "fía nada" del Ejecutivo.

También Sordo ha reconocido que, teniendo en cuenta la composición del Parlamento, "las expectativas" de cambio son "pequeñas" y "pueden empeorar" y, por ello, ha pedido que el rechazo a la reforma se "visualice de tal manera" que tanto al Gobierno como los distintos grupos parlamentarios se "replanteen" los términos de la reforma.

"Si hay millones de ciudadanos el domingo en la calle, mal haría el Gobierno en no tomar nota de esa respuesta", ha advertido el dirigente sindical, que ha considerado que esta reforma es "la más dura" y supone "una especie de bomba racimo que atenta directamante contra el propio concepto de derecho laboral y que luego se deriva atentando con cada uno de los derechos laborales".

Asimismo, ha lamentado que está diseñada "al dictado de poderes externos", responde "casi a la imagen de un país intervenido" y no atiende a "las necesidades reales de las empresas y los trabajadores de España y, desde luego, mucho menos de Euskadi". Según ha indicado, esta reforma "prioriza el despido" sobre otras opciones, de manera que "va a ser una acelerador para que en el Estado a lo largo de este año nos asomemos a la cifra de seis millones de parados".

A su entender, con esta propuesta, se plantea que "el Estatuto de los Trabajadores tenga un único artículo que diga algo así como que 'lo que diga el empresario, como diga el empresario, cuando diga el empresario y hasta que diga el empresario'" y "rompe" el acuerdo alcanzado por CC.OO, UGT y CEOE, "tomando partido en la discrepancia que había en la CEOE avalando las tesis de la patronal española más reaccionaria y más cutre".

RECLAMACIONES JUDICIALES

Del mismo modo, ha advertido de que no favorece "la flexibilidad interna pactada como elemento alternativo al despido", sino que "favorece la desregulación" y establece la "no aplicación de los convenios colectivos con una facilidad extrema" y la modificación de lo pactado, dando capacidad de acción "casi unilateral" al empresario.

"Está en radical línea distinta a la que planteábamos el acuerdo, que no se llegó a concretar en Euskadi, por CC.OO., UGT, LAB y Confebask", ha agregado Unai Sordo, que ha apelado al "sentido común" de la patronal vasca porque, si "estaba y está dispuesta a hablar de las cosas que hablamos en aquella negociación que pretendía mantener un ámbito de convenio colectivo en Euskadi y que las medidas de flexibilidad en las empresas fueran pactadas, no puede aplaudir con las orejas esta reforma". En caso contrario, ha añadido, le estaría haciendo "flaco favor a las necesidades de las empresas vascas".

El responsable de CC.OO. en Euskadi ha augurado que, además de "una escalada de movilización", la reforma va a "generalizar la conflictividad en el ámbito de las empresas" y "las reclamaciones judiciales individuales y colectivas" al eliminar la necesidad de autorización de los ERE, generando "una inseguridad" en las empresas.

Por su parte, Casado ha asegurado que la reforma planteada por el Gobierno de Mariano Rajoy, que ha sido más "dura" de lo esperado, "quita todos los derechos a los trabajadores" y supone perder "de golpe" todo lo conseguido a lo largo de la democracia.

Además de "injusta" con los trabajadores, el proyecto es, a entender del secretario general de UGT Euskadi, "ineficaz" para la economía e "inútil" para el empleo. Tras ha resaltado que posibilita el despido con indemnización "de 20 días o cero", ha animado a movilizarse no sólo a los trabajadores, sino también a desempleados, jóvenes y jubilados.