Asegura que la expectativa ha resultado "fallida" porque la negociación colectiva sigue la misma dinámica que antes del pacto
BILBAO, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
Confebask cree que el sindicato ELA firmó el acuerdo interprofesional de negociación colectiva hace un año para "atemperar críticas" y no para acometer la renovación de los convenios. Asimismo, ha añadido que la expectativa por este pacto ha resultado "fallida" porque la negociación colectiva en Euskadi ha seguido la misma dinámica que antes del acuerdo, según la reflexión del director de Laboral de la patronal vasca, Jon Bilbao, recogida por Europa Press.
Bilbao ha recordado que el Acuerdo Interprofesional despertó "expectativas generalizadas", también en el mundo empresarial, en primer lugar, porque era el primer acuerdo intersectorial suscrito con el sindicato mayoritario en más de 15 años y, "en segundo, porque quien firma la protección de un ámbito negocial concreto es que tiene voluntad de mantenerlo y desarrollarlo".
Asimismo, ha destacado que también suponían que "volver a dotar de un ritmo aceptable" a la renovación de los convenios "tampoco iba a ser una tarea sencilla porque suponía un cambio de actitud por parte del sindicalismo mayoritario del que no se tenía constancia".
En este sentido, cree que ha resultado una "expectativa fallida", ya que, durante 2017, se ha repetido la misma dinámica que en los años precedentes, de manera que "allí donde las mayorías sindicales recaían en CCOO y UGT se han firmado todos los convenios, sin excepción".
"Este es el caso de los convenios sectoriales de Álava. Eso sí, aquí nadie regala nada y esos convenios se han firmado trabajosamente, tras negociaciones largas y arduas pero, al final, se han ido alcanzando acuerdos que beneficiaban a ambas partes: trabajadores y empresas. Pero cuando cambia el interlocutor social el acuerdo se torna muy difícil cuando no directamente imposible. Este ha sido más frecuentemente el caso de Bizkaia y, especialmente de Gipuzkoa donde la mayoría que conforman ELA y LAB es casi hegemónica", ha añadido.
"ATEMPERAR LAS CRÍTICAS"
Por lo tanto, cree que "todo induce a pensar" que la firma del acuerdo tenía el objetivo de "atemperar las críticas sobre la pérdida de ámbitos que recaían sobre quien había sido el gran adalid del marco autónomo de relaciones laborales, pero no acometer en serio la renovación de los convenios".
El responsable de Confebask ha señalado que, independientemente de "los sujetos intervinientes", la dificultad estructural que está padeciendo la renovación de los convenios, especialmente sectoriales, es que "la cultura y los planteamientos clásicos y tradicionales se pretenden mantener en un mundo que ha cambiado y sigue cambiando mucho y a un ritmo extraordinario".
Bilbao ha indicado que muchos de los planeamientos en las mesas de negociación son "exactamente los mismos que se hacían en los tiempos de bonanza económica, allá en los años 2007 o 2008", como, "si desde entonces no hubiéramos padecido la crisis más larga y más dura de la que tenemos memoria viva y que ha ubicado al mundo y a las empresas en un entorno radicalmente distinto".
En este sentido, ha precisado que las empresas que han sobrevivido han tenido que hacer "un enorme esfuerzo de adaptación" mediante la "incorporación masiva" de tecnología y la adaptación para competir en el mercado global. Según ha subrayado, esa transformación ha requerido un "esfuerzo organizativo extraordinario" para, por ejemplo, "lograr que uno de cada tres euros que producimos en Euskadi lo genere el mercado mundial. "Quienes no han logrado adaptarse han desaparecido; casi 8.000 empresas ni más, ni menos", ha señalado.
El representante de Confebask ha manifestado que "semejante transformación" también afecta a la forma en la que se trabaja, pero ha lamento que la inmensa mayoría de los convenios están "redactados hace décadas".
"Y, en muchos casos, nos encontramos no solo con enormes resistencias a modificar claúsulas que ya no tienen ningún sentido, sino en demasiados casos con la pretensión de eliminar los márgenes de flexibilidad que desde los distintos cambios normativos se han ido abriendo para dar respuesta a la necesidad de adaptarse a cambios constantes".
Asimismo, ha indicado que, en la renovación de los convenios se juega la supervivencia de las empresas y de los puestos de trabajo. "O somos capaces de dotarnos de las condiciones y los medios para operar en el mundo de hoy o seguiremos donde estamos. Eso sí, las veces que lo logramos tenemos una herramienta, el Acuerdo Interprofesional, que protege lo que hemos acordado", ha concluido.
