BILBAO, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Confederación Empresarial Vasca, Confebask, ha manifestado que se ha constatado un "nuevo fracaso" de la huelga general convocada para este jueves en Euskadi, que ha tenido un "eco prácticamente nulo" en Álava, "mínimo" en Bizkaia y "muy desigual" en Gipuzkoa.
Según ha manifestado esta organización en un comunicado, la mayor parte de la ciudadanía ha acudido, "como siempre", a su trabajo y el comercio, el transporte y los servicios están funcionando "con normalidad" en prácticamente todos los territorios, circunscribiéndose el "escaso" seguimiento que está registrando la convocatoria tan sólo al sector industrial, especialmente en Gipuzkoa, si bien "muy limitado" a algunas comarcas y empresas.
En concreto, ha indicado que las empresas alavesas están desarrollando su actividad como cualquier otra jornada, siendo apenas el 8 por ciento e los trabajadores los que secundan la movilización.
En Bizkaia, según Confebask, el seguimiento en zonas como el Gran Bilbao es "testimonial", mientras que en el conjunto del sector industrial del territorio es de apenas un 15 por icento.
La patronal vasca ha indicado que tan sólo en Gipuzkoa se ha llegado a alcanzar en la industria "un cierto seguimiento del 28 por ciento, muy circunscrito a determinados sectores, comarcas y empresas de cierta dimensión", dado que las pymes están funcionando "con entera normalidad".
"La huelga, de hecho, no ha detenido la actividad económica y ni siquiera las empresas con trabajadores en huelga han parado, no teniendo tampoco reflejo en otros ámbitos de la vida cotidiana", ha añadido.
Por tanto, Confebask cree que el "fracaso cosechado" por esta huelga, que viene a sumarse "a los ya registrados" por anteriores convocatorias, confirma la "creciente distancia" con que la sociedad vasca contempla este tipo de movilizaciones y "la responsabilidad y realismo" con que los trabajadores hacen frente a una situación económica "tan grave como la que padecemos, en la que las huelgas tienen escasa justificación y cabida".
A su juicio, los trabajadores vascos "conocen también y valoran el enorme esfuerzo" que están realizando las empresas para mantener los puestos de trabajo y actúan "en consecuencia".
