Foto: EUROPA PRESS
av2" class="NormalTextoNoticia" itemprop="articleBody">
BILBAO, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Consorcio de Transportes de Bizkaia (CTB) ha iniciado un proceso de análisis para determinar si es técnicamente posible y viable la posibilidad de recargar la tarjeta sin contacto Barik a través de los teléfonos móviles de última generación.
Según ha informado el CTB, se trataría de convertir el smartphone en un nuevo punto para cargar saldo o títulos de transporte temporales en la tarjeta, entre otras funciones. Para esta fase inicial de análisis y desarrollo informático, que durará unos ocho meses y que incluirá una prueba colectiva con clientes de la tarjeta gestionada por el Consorcio, se van a invertir un total de 96.000 euros.
El proyecto piloto se enmarca en la política del CTB por incorporar progresivamente en Bizkaia los últimos avances tecnológicos en el campo de los sistemas de ticketing.
Si la prueba es satisfactoria, el CTB incorporaría esta tecnología a lo largo del próximo año 2015 lo que facilitaría las operaciones de recarga e información que actualmente se pueden realizar solamente en puntos fijos como son las máquinas del transporte público (Metro Bilbao, Euskotren, Euskotran, Puente Colgante y Funicular de Artxanda), estancos, kioscos, locales comerciales, cabinas de Bizkaibus y Bilbobus, y cajeros multiservicio de la BBK.
En este momento, ha recordado el CTB, existen 1.058.000 tarjetas Barik en circulación y más de 800 puntos de recarga repartidos por toda Bizkaia.
Para desarrollar esta tecnología, el CTB ha adjudicado dos contratos. En el primero, la empresa Navarra Tecnología del Software, S.L. desarrollará por 37.000 euros una aplicación móvil para dispositivos Android con tecnología NFC (Near Field Communication), la cual permite la comunicación inalámbrica de corto alcance y alta frecuencia entre varios dispositivos, en este caso, entre la tarjeta y el teléfono móvil.
El planteamiento del CTB contempla la recarga de títulos de transporte en la tarjeta Barik en modo "on line", utilizando un terminal móvil con NFC activo y abonando su importe a través de una pasarela de pagos que se albergaría en los servidores centrales del Consorcio, de modo que el usuario desde cualquier localización geográfica y, sin tener que pasar por un punto fijo de recarga, pueda aumentar el saldo de su tarjeta o comprar cualquier título de transporte consorciado, lo que supone una mejora sustancial que favorecería el uso del transporte público.
Algunos teléfonos de gama alta y media incluyen este sistema de comunicación por proximidad (NFC) que cada vez comienza a ser más habitual en los terminales móviles que salen al mercado. En los próximos años, los expertos esperan un aumento considerable del uso de esta tecnología con multitud de aplicaciones diferentes. Sería la primera vez que este sistema se probaría en las denominadas tarjetas Mifare Desfire como la Barik, de ahí que el CTB apueste, antes de su incorporación, por chequear su funcionamiento a través de un ensayo.
ACTIVAR LA APP
Básicamente, la empresa adjudicataria deberá activar en un plazo de cuatro meses una APP con aquellos aspectos que tienen que ver con la interface y la navegación, similares a los que se pueden encontrar en la pantalla de una MEAT Barik del metro. La prueba se desarrollará bajo el sistema operativo Android, el más extendido en el mercado, pero, de concretarse, podría extenderse después a otros entornos como el IOS (iphone).
Para el desarrollo de esta prueba piloto, el CTB ha desplegado un segundo lote para diseñar el apartado de operaciones criptográficas y autentificación de las tarjetas Barik, incluyendo una pasarela de pago y los sistemas de seguridad pertinentes para efectuar con garantías este tipo de transacciones. Este apartado lo desarrollará la empresa Smarting Engineering, S.L. por un importe de 59.000 euros.
La decisión definitiva sobre la implantación de esta tecnología se tomará tras estudiar los resultados obtenidos de un chequeo general que realizará un colectivo de clientes previamente seleccionado en función de diferentes variables (edad, tipo de tarjeta, transporte utilizado, trayecto), que pondrá a prueba durante un periodo aún sin determinar, el funcionamiento del nuevo sistema móvil de recarga.
