La Ertzaintza imputa un delito de desobediencia a un parlamentario de Aralar por una manifestación en Vitoria

mikel basabe
EP
Actualizado: viernes, 4 febrero 2011 12:14

Basabe denuncia la actuación "desproporcionada" de la Policía vasca durante la huelga general del 27-E

VITORIA, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Ertzaintza ha abierto un atestado sobre una manifestación celebrada el pasado 27 de enero en Vitoria, en el que imputa un presunto delito de desobediencia al parlamentario de Aralar Mikel Basabe. Éste, a su vez, ha asegurado que fue golpeado, junto a otros manifestantes, por agentes de la Policía autonómica que cargaron contra la marcha.

El consejero de Interior del Gobierno vasco, Rodolfo Ares, ha dado a conocer esta decisión en el transcurso del pleno de control que celebra este viernes el Parlamento autonómico, en respuesta a una interpelación del propio Basabe sobre la "desproporcionada" actuación de la Ertzaintza durante la citada manifestación.

La huelga general del pasado 27 de enero fue convocada por ELA, LAB y otros sindicatos nacionalistas, y recibió el apoyo de algunos partidos, entre ellos el de Aralar.

Ares ha asegurado que la actuación de la Policía vasca fue "profesional y proporcionada". Aunque ha reconocido que pudieron producirse "empujones" e incluso "algún golpe", ha destacado que fueron algunos de los participantes de la marcha quienes desencadenaron los incidentes.

El titular de Interior ha manifestado que parte de los manifestantes lanzaron "todo tipo de objetos", incluidas tapas de alcantarilla, contra los agentes, a los que también dirigieron "insultos".

Según ha indicado, de los atestados realizados por la Policía y del visionado de los vídeos sobre la marcha, que tuvo lugar en la calle Dato de Vitoria, se observa que, "desde el comienzo, hubo gente que se dedicó a generar conflicto con la Ertzaintza".

"SABOTAJES Y COACCIONES"

Además, ha indicado que varios manifestantes trataron de cerrar comercios que se encontraban abiertos. En este sentido, ha subrayado que la Policía "tiene la obligación de garantizar el derecho de los ciudadanos a hacer huelga, pero también debe garantizar que las personas que quieran acceder a su puesto de trabajo puedan hacerlo". Asimismo, ha denunciado que, desde el inicio del paro general, hubo "sabotajes y coacciones".

Ante esta situación, ha lamentado que ni los convocantes de la huelga ni los partidos que la apoyaron hayan criticado hasta ahora tales hechos. Ares se ha dirigido a Basabe para recordarle que, si lo desea, puede recurrir a los tribunales de justicia "para plantear todas las denuncias que considere oportunas" sobre la actuación de la Policía autonómica. En este punto, le ha advertido de que "también hay alguna imputación de ellos contra usted".

Posteriormente, en declaraciones a los periodistas en los pasillos del Parlamento, el responsable autonómico de Interior ha explicado que en el atestado abierto sobre los hechos ocurridos en la manifestación se incluye una imputación de desobediencia contra Basabe. Al parecer, éste no habría atendido a los requerimientos de los agentes.

Ares ha precisado que este tipo de actuaciones son algo habitual en atestados de estas características y ha subrayado que, a partir de ahora, será la Justicia la que decida qué actuaciones llevar a cabo.

La identificación del parlamentario de Aralar se produjo cuando éste, que participaba en la manifestación, reclamó a uno de los agentes que cargaron contra la marcha su número de identificación profesional. El policía, según Ares, solicitó entonces a Basabe -quien se había identificado como parlamentario-- su documentación para verificar su identidad, tras lo que le comunicó su número de placa.

BASABE

Por su parte, Basabe ha criticado que los agentes "pegaron" a varias personas que participaban en la manifestación y que no incurrieron en acto alguno de violencia, incluido él mismo, por lo que ha considerado que los agentes actuaron con fuerza "desproporcionada".

Además, ha afirmado que el "mensaje" de Ares parece consistir en que "la Ertzaintza está por encima de toda crítica", algo que ha considerado "peligroso y equivocado".