SAN SEBASTIAN, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
Decenas de familiares y allegados de Inaxio Uria, acompañados de representantes institucionales, así como trabajadores de la empresa Construcciones Altuna y Uria, se concentraron este lunes, como cada mes, en Azpeitia para recordar a este empresario azpeitiarra asesinado por ETA el pasado 3 de diciembre en esta localidad guipuzcoana.
Esta concentración silenciosa se desarrolló durante 15 minutos a partir de las 13.00 horas, junto al restaurante Kiruri y la empresa Construcciones Altuna, donde fue tiroteado, hace ahora ocho meses, el empresario guipuzcoano.
En el lugar se habían colocado, como es habitual, dedicatorias, rosas rojas y flores, y tres farolillos con velas encendidas así como un cartel con la palabra 'Paz' en euskera y castellano y varios textos con palabras de recuerdo a Uria.
Asistieron a este acto de recuerdo a Inaxio la presidenta de las Juntas de Gipuzkoa, Rafaela Romero; el alcalde de Azpeitia, Julián Eizmendi; y el de Azkoitia, Asier Aranbarri; el gerente de Altuna y Uria, Fernando Lucas; la diputada foral de Cultura de Gipuzkoa, María Jesús Aranburu; y el diputado del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, entre otros.
RECUERDO A LAS VICTIMAS "INOCENTES"
Romero aprovechó esta ocasión para reclamar a la sociedad vasca, a través de un comunicado, que recuerde a las víctimas "inocentes" del terrorismo porque es un "deber cívico y una obligación democrática".
A su juicio, hay que demostrarles "que esta sociedad apoya y reconoce a las víctimas inocentes de la violencia terrorista y repudia los actos criminales que comete ETA". Además, la presidenta de las Juntas guipuzcoanas trasmitió un recuerdo "emocionado" para las dos últimas víctimas de ETA, los guardias civiles Carlos Sainz de Tejada y Diego Salva Lezaun y sus familiares, amigos y compañeros, así como un mensaje de "esperanza y seguridad" en el Estado de Derecho.
Por último, manifestó su voluntad de seguir contribuyendo desde las instituciones democráticas a "desautorizar y destruir el mensaje intolerante y violento de los terroristas y aquellos que les apoyan". "Entre todos vamos a lograr una Euskadi libre de odios y plena libertad y tolerancia. En esa Euskadi sólo sobran los que practican y apoyan la violencia", dijo.
La familia de Uria ha venido concentrándose todos los meses coincidiendo con la fecha del asesinato del empresario azpeitiarra para "reivindicar" su "memoria" en el lugar donde fue tiroteado.
Uria, de 71 años de edad y que trabajaba junto a dos de sus hermanos y sus hijos en la empresa constructora familiar Altuna y Uria, que participa en las obras de la 'Y' vasca, fue asesinado el pasado 3 de diciembre por ETA cuando se dirigía al restaurante Kiruri de Azpeitia, donde diariamente solía acudir a jugar a las cartas con sus amigos.
