Eguzki denuncia el "contrasentido" que supone la existencia de un campo de tiro en una Zona de Especial Conservación de la Red Natura 2000
SAN SEBASTIÁN, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un cabo y dos números de la Guardia Civil están llamados a declarar el próximo 4 de febrero ante el Juzgado de Instrucción número 3 de San Sebastián, en el marco de las diligencias abiertas por el incendio que el 10 de marzo del año pasado arrasó 5,5 hectáreas en Jaizkibel, dentro de la Zona de Especial Conservación (ZEC) de la Red Natura 2000. La Fiscalía considera que podrían haber incurrido en un delito contra el medio ambiente.
El colectivo ecologista Eguzki, que en su día ya denunció el incendio ante la Fiscalía y se halla personado en las diligencias, ha recordado que los hechos tuvieron lugar en el campo de tiro militar, situado en el seno de la propia ZEC, cuando los guardias destruían material pirotécnico caducado.
A través de un comunicado, Eguzki ha subrayado el "contrasentido" que supone la existencia de un campo de tiro en un espacio que, "por sus valores naturales", ha sido declarado Zona de Especial Conservación, y ha reiterado la demanda de desmantelamiento. Además, ha considerado que "no es de recibo que no se adopten medidas preventivas que impidan sucesos como éste".
El colectivo se ha congratulado de que los presuntos causantes de aquel incendio "hayan sido identificados y por lo menos llamados a declarar, pues, con independencia de las decisiones que a partir de ahora pueda tomar el juez, eso no es nada habitual en este tipo casos". En esa línea, ha incidido en que "solo en Jaizkibel, donde el fuego es un mal endémico, se han registrado alrededor de 60 incendios desde 2002, la mayoría provocados".
HÁBITATS PROTEGIDOS
En esa línea, ha incidido en que el incendio del año pasado "es un ejemplo palmario de que no es compatible proteger un espacio natural con provocar explosiones en el mismo".
Además, ha apuntado que, según el informe del Servicio de Montes de la Diputación, "se quemaron 5,5 hectáreas de monte bajo, constituido por brezales atlánticos y áreas de roble marojo, hábitats de interés comunitario, claves para la Comisión Europea en la declaración de la ZEC de Jaizkibel, que prevé su protección y mejora".
El informe técnico estima que "serán precisos cuatro o cinco años para que el argomal y el brezal vuelvan a la situación anterior al incendio y 7 u 8 en el caso del marojal".
Eguzki ha precisado que los hechos se produjeron el 10 de marzo de 2014. Los tres guardias ahora llamados a declarar, adscritos al Grupo Especialista en Desactivación de Explosivos (GEDAX), "se hallaban destruyendo material pirotécnico, concretamente, siete cargas propulsoras de bengalas caducadas, según fuentes de la propia Guardia Civil".
Los guardias no pudieron sofocar el fuego y comunicaron la situación a la Comandancia de Intxaurrondo, que a su vez llamó a SOS Deiak. Poco después, acudieron al lugar guardas forestales y bomberos.
