López afirma que el acuerdo de políticas activas es "deficitario" porque el PNV "quería colgarse alguna medalla"

El lehendakari, Patxi López
GOBIERNO VASCO-IREKIA
Actualizado: viernes, 1 abril 2011 13:40

Dice que le hubiera gustado una cuantificación mayor de las bonificaciones a la contratación, más cercana a los 200 millones

VITORIA, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -

El lehendakari, Patxi López, ha reconocido que el acuerdo de la transferencia de las políticas de empleo activas asumido por el Gobierno vasco es "deficitario" y ha responsabilizado al PNV de esta situación afirmando que "la situación económica de Euskadi es peor por la intermediación del algunos que lo único que querían era colgarse alguna medalla".

López ha realizado estas declaraciones en respuesta a una interpelación del parlamentario del PP, Antton Damborenea, sobre la valoración económica de la transferencia en materia de políticas activas de empleo y de su "grave" impacto en la política presupuestaria, ya que el coste de las bonificaciones a la contratación en el País vasco podría suponer un "agujero" de más de 50 millones de euros.

El lehendakari ha recordado que el Gobierno vasco "aspira" a que Euskadi complete su Estatuto y lo haga "en los términos pactados originariamente". "No renunciamos a ninguna competencia o ejercicio de función que nos corresponda de acuerdo con la literalidad del Estatuto", ha defendido antes de defender que el traspaso de competencias "debe materializarse sobre la base del Concierto Económico".

En este sentido, ha explicado que, bajo estas premisas, el Ejecutivo abrió el proceso negociador de las políticas activas con el Gobierno central para "configurar el traspaso agotando todas las posibilidades", lo que supone "incluir absolutamente todas las posibles funciones o servicios transferibles, aún cuando algún servicio pudiera resultar deficitario por la aplicación del régimen de Concierto Económico".

Al respecto, López ha recordado que el sistema del Concierto se basa en el principio de "riesgo compartido" y ha indicado que los acuerdos parlamentarios aprobados sobre esta materia exigían que se asumiera el traspaso incluyendo las bonificaciones "por mucho que en algún ejercicio presupuestario la cuenta pudiera salir negativa".

Asimismo, ha defendido que no ha denunciado un impacto presupuestario por la transferencia de las bonificaciones porque "está por ver el efectivo impacto" de las mismas ya que las cifras se refieren al ejercicio 2009 y el traspaso tiene efectos desde 2011. "Habrá que esperar a ver cómo evoluciona la contratación incentivada para tener cifras reales y datos ciertos", ha insistido.

Sin embargo, ha aclarado que, aunque este impacto fuera negativo, no denunciará la aplicación del concierto económico porque "si es un sistema de riesgo que forma parte de las bases de nuestro autogobierno, hay que estar con él a las duras y a las maduras".

Ante la posibilidad de que el Ejecutivo vasco tenga que abonar cantidades no presupuestadas por estas bonificaciones, López ha explicado que lo hará "utilizando las herramientas e instrumentos previstos al efecto, como cada vez que se produce una desviación presupuestaria". Además, ha afirmado que no es propósito del Gobierno vasco renegociar la transferencia recibida y ha apostado por "asumir coherentemente el marco jurídico que tenemos".

ELIMINAR LAS BONIFICACIONES

Por otro lado, ha afirmado que las políticas activas están en pleno proceso de transformación y en particular, los incentivos a la contratación en forma de bonificación de cuotas, que están siendo especialmente cuestionadas, por lo que "no sería extraño que desaparecieran". De esta forma, ha indicado que desparecerían las partidas del cupo que hace referencia a este concepto como la de gastos que se incluye en los presupuestos vascos.

López ha reconocido que "le hubiera gustado" que la cuantificación por las bonificaciones fuera "mayor" y más cercano a los 200 millones de euros pero ha recordado que en las negociaciones de transferencias "hay que tener una perspectiva global". "Mi gobierno dio prioridad a cerrar un debate de 30 años en el que cada año que pasaba sin la transferencia perdíamos más de 100 millones de euros anuales", ha indicado.

El lehendakari ha responsabilizado de esta situación al "cerrojazo" de la negociación y ha hecho referencia al anuncio del PNV quien aseguró que, gracias a su gestión, Euskadi había conseguido 172 millones más. "Ha resultado que ese era el cuento de la lechera porque el acuerdo hemos asumido es deficitario porque no vamos a tener más dinero sino menos", ha criticado.

Sin embargo, ha subrayado que la transferencia alcanzada es "buena en su conjunto" pero ha insistido en que "la situación económica de Euskadi es peor por la intermediación del algunos que lo único que querían era colgarse alguna medalla".

AGUJERO DE 50 MILLONES

El parlamentario del PP Antton Damborenea, por su parte, ha explicado que, según datos del Ministerio en el año 2009, el coste de las bonificaciones en el País vasco ascendió a 208.777.357 euros, lo que supone un agujero de 50 millones que el Gobierno no tiene previsto cómo pagar.

Por ello, ha alertado del "agujero" de más de 50 millones de euros que se le produce al Gobierno vasco por la "supuesta competencia", ya que "sólo tenemos competencia para pagar". Asimismo, ha subrayado que esta situación contiene la paradoja de que "cuantos más parados, mejor parado sale el Gobierno vasco porque menos bonificaciones pagará".

Damborenea ha responsabilizado también al PNV de que con su negociación ha conseguir una "reducción del gasto corriente del gobierno de Zapatero que ha trasladado al Euskadi" y ha calificado esta transferencia como "de pago", ya que "no vamos a gestionar nada y nos va a costar 50 millones más al año".