BILBAO, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de Comisiones Obreras de Euskadi, Unai Sordo, negó este domingo que el alto nivel de paro en España sea producto de la rigidez del mercado laboral, por lo que rechazó que la solución pase por la reforma que pide la patronal y que incluye medidas como abaratar el despido y flexibilizar la contratación.
"Sería incidir en las mismas recetas que nos han llevado al actual modelo económico de pies de barro", afirma en una entrevista al diario El Correo, recogida por Europa Press.
El dirigente sindical evita hablar de recuperación económica hasta que remonte el empleo, y señala que 2010 se presenta "muy delicado en este campo, con miles de trabajadores afectados por EREs y una pérdida masiva de puestos de trabajo". Además, teme que la creación de empleo se va a demorar "un tiempo porque es difícil que tenga lugar con un crecimiento económico inferior al 2 por ciento".
A su juicio, los empresarios "pueden caer en la tentación de atender el previsible aumento de la demanda sin contratar a más gente, mediante fórmulas como alargar la jornada". Por ello, considera que hay que incentivar la contratación y que la prioridad política y sindical debe ser acelerar la recuperación del empleo.
RIGIDEZ DEL MERCADO
Sordo asegura que es "absolutamente falso" que el fuerte incremento del paro en España y Euskadi se deba a la rigidez del mercado laboral y añade que "si en los últimos 18 meses se ha destruido tanto empleo, es consecuencia de la debilidad de un tejido productivo demasiado ligado a sectores volátiles como el inmobiliario".
En su opinión, las fórmulas que propone la patronal estatal para flexibilizar el mercado "no son más que las mismas recetas que nos han llevado a la actual situación, a un modelo económico con los pies de barro". "Se trata de alargar una forma de competir basada en el ajuste laboral en vez de hacerlo con calidad e innovación. Por eso no se ha regenerado el tejido productivo", explica.
Respecto a las voces que reclaman una reforma laboral, Unai Sordo afirma que "hay consenso entre los neoliberales" que copan los organismos que lo reclaman, "pero nosotros también hemos reunido a 700 economistas que dicen lo contrario".
Preguntado por en sentido de las negociaciones abiertas entre patronal y sindicatos, Sordo argumenta que se puedan adoptar medidas de flexibilidad dentro de cada empresa. No obstante, se muestra convencido de que lo que propone la patronal como "bálsamo, que es precarizar la contratación y abaratar el despido, no sirve de nada".
"¿Cómo va a avanzar un sistema si se atiende su reivindicación de rebajar las cuotas a la Seguridad Social? Entonces no habrá dinero suficiente para garantizar la red de protección social. No se puede utilizar la crisis para alargar viejos esquemas que han llevado a un tejido económico tan débil como el que tenemos", asevera.
FLEXIBILIDAD
Según explica, las medidas de flexibilidad se deben estudiar para cada sector y cada empresa. "En los sectores con mucho problema de demanda se pueden aplicar fórmulas como el contrato alemán -reducir la jornada y que el Estado compense al trabajador en una parte-, que se podría incorporar en España con un pequeño cambio en el Estatuto", indica.
Cuestionado por la forma en que ha gestionado la crisis el lehendakari, Patxi López, el dirigente de CC.OO. de Euskadi valora aspectos positivamente, como el impulso que ha dado al diálogo social. Sin embargo, dice ser "muy crítico" con el Presupuesto porque "no va a ser suficiente".
Aunque reconoce "cierto esfuerzo" en materia social, señala que "podría haber sido mucho más expansivo porque Euskadi tiene capacidad de endeudamiento" y apuesta por un "gran pacto" para rediseñar todo el sistema impositivo.
Tras aplaudir el acuerdo de las diputaciones forales para aumentar la tributación de las Sicav, que gestionan las grandes fortunas, lo que consideraba una "situación sangrante", precisa que en este tipo de medidas es necesaria "cierta coherencia con lo que se hace en España y la Unión Europea, para evitar efectos contraproducentes".
ELA Y LAB
Por otra parte, recuerda que ELA y LAB han decidido autoexcluirse de todos los espacios en los que se defienden los derechos de los trabajadores. "Eso de autoerigirse en mayoría sindical para luego abandonar a los trabajadores a su suerte no creo que sea sostenible. Sin embargo, ELA luego no ha tenido ningún problema en llegar a un acuerdo con el Gobierno de Patxi López sobre las condiciones laborales de los funcionarios. Así que puede estar moviéndose algo", indica.
Unai Sordo recuerda que ELA "un día se estaba manifestando delante de Lakua contra la política neoliberal de Patxi López y, al siguiente, va y firma el convenio de función pública". "Puede que semejante incongruencia responda a algún tipo de reflexión", sugiere.
En todo caso, rechaza que la crisis dé pie a la unidad sindical en Euskadi, porque "no es una cuestión de crisis o no crisis". "Se trata de asumir que cada sindicato tiene su propio proyecto de país y que, aún así, se pueden llegar a acuerdos. Pero si eso no se entiende, no hay nada que hacer. Es muy difícil avanzar", concluye.
