BILBAO, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, se mostró este martes favorable a que se hable de "desarme" con ETA "con un control y una sanción parlamentaria". Además, afirmó que su partido no creerá en una declaración de la izquierda abertzale que no contenga "un posicionamiento claro contra ETA"
En una entrevista concedida a RNE, recogida por Europa Press, Urkullu consideró que se cae "en el enredo pretendido" y "la confusión" cuando se habla de diálogo con la banda porque, cuando su partido "habla de diálogo, no habla de negociación ni diálogo político".
"Hemos dicho desde el PNV con claridad meridiana que hay que hablar con todo el mundo porque todos los procesos necesitan de un diálogo que no tiene por qué ser, y eso es lo que nosotros rechazamos, un diálogo político con una organización terrorista", dijo.
A su juicio, "hay diálogos necesarios para el desarme, para una política de respeto a las víctimas del terrorismo y para una política penitenciaria que coadyuve a lo que pueda ser un proceso de desarme de una organización terrorista". "Y, en ese caso, además, lo que reivindicamos es que ese diálogo tenga una habilitación, un control y una sanción parlamentaria, cosa que no ha ocurrido hasta la fecha", señaló.
El líder jeltzale reivindicó "el diálogo político" para las formaciones políticas, pero precisó que en él no se puede incluir a Batasuna "o a como se llame ese mundo que quiere hacer política, mientras no haya una separación manifiesta de lo que es la tutela de una organización terrorista".
"HIPOTESIS" SOBRE ETA
En cuanto a la posibilidad de que ETA pretenda cometer atentados para, después, realizar un parón para propiciar que la izquierda abertzale pueda acceder a la legalidad, afirmó que se trata de "una hipótesis" y precisó que el PNV no está "enfrascado en ese debate".
"Entendemos que, si como hipótesis, es plausible, se repite una manera de actuar de ETA de hacer parones en su actividad violenta terrorista para intentar poner el cebo del ejercicio de la política a aquellos que, ante los atentados de ETA, callan o no los condenan, y hacen o pretenden hacer política con la tutela de ETA. Es una de las hipótesis con la que hay que jugar siempre", añadió.
Además, apuntó que, si Arnaldo Otegi realizase una declaración similar a la de Anoeta de apuesta por las vías políticas, su partido respondería que, "mientras Batasuna no tenga un posicionamiento claro contra ETA, no es creíble por la experiencia" que tienen los partidos y el conjunto de la sociedad vasca.
"Creímos en la posibilidad de que Batasuna tuviese su autonomía de acción política con su declaración de Anoeta en el año 2004, abordamos un proceso llamado de paz en 2006-2007, y vimos cómo Batasuna no podía hacer política mientras ETA siguiera autoerigiéndose en una organización pretendidamente político-militar", apuntó.
CONDENA
Por ello, subrayó que "cualquier planteamiento de Arnaldo Otegi o de cualquier portavoz de esa autodenominada izquierda abertzale, si no va acompañada de una condena de ETA, es claro que no es creíble".
También destacó que "Batasuna tiene el contador a cero y, para poder hacer política, tiene que saber vivir sin la tutela y, además, rechazar cualquier método violento y proclamar su apuesta exclusivamente por vías políticas".
Tras destacar que, para la formación jeltzale, la banda "es una organización terrorista" y supone "crimen", consideró que la sociedad "no debe nada a ETA, sino al contrario". Además, insistió en que ETA nació "con una pretensión inicial de suplantar al PNV, se echó en brazos también de reivindicaciones revolucionarias en la década de los 70, para convertirse últimamente, en los últimos años ya, en una organización única y exclusivamente terrorista".
"El problema es que la sociedad vasca tiene una tragedia nacional que se llama sólo ETA. Y sabemos que políticamente el PNV es el objetivo político de ETA y de todo ese mundo, con el fin de suplantar al nacionalismo democrático de compromiso institucional", concluyó.
