Lokarri publica las conclusiones de la iniciativa 'Hitzorduak' de diálogo y encuentro con víctimas de la violencia y expertos
SAN SEBASTIÁN, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
El periodista Gorka Landaburu, víctima de ETA, y Pili Zabala, hermana del miembro de ETA Joxi Zabala asesinado por los GAL en 1983, han destacado la importancia de relatar lo ocurrido "de un lado y del otro", así como del reconocimiento del daño causado, aunque han considerado que es el momento de que esto se refleje "no solo en palabras, sino también en hechos". En ese sentido, han reclamado "acciones" que vayan más allá de "palabras bonitas" o "conferencias rimbombantes".
Landaburu y Zabala han realizado estas afirmaciones en la presentación en San Sebastián de la publicación que ha realizado Lokarri sobre la experiencia puesta en marcha a través de la iniciativa 'Hitzorduak', que ha consistido en una serie de espacios de encuentro, participación y diálogo, en la que han tomado parte junto a la miembro de Lokarri Maialen Lizarralde.
De enero a junio de este año se han llevado a cabo en diferentes localidades y barrios y en ella han participado 800 personas en los 26 coloquios realizados sobre "derechos humanos, civiles y políticos, la memoria y la verdad, las víctimas, la reintegración de las personas presas o los consensos".
Entre los ponentes destacan personas expertas en el ámbito académico o profesional, representantes de grupos que trabajan en torno al proceso de paz o personas que han sufrido en carne propia las consecuencias de la violencia y vulneraciones de Derechos Humanos.
"MOMENTO CRUCIAL"
Landaburu ha señalado que nos encontramos en un momento "crucial" en el que hay que "gestionar el fin de todas las violencias en general" y ha destacado la importancia de "afianzar la paz", así como de "gestionar la memoria para que se sepa a través de relatos lo que ha pasado en nuestra tierra durante varias décadas". Además, ha insistido en la necesidad de que se reconozca "el daño causado".
En cuanto a su participación en los encuentros, ha considerado que ha sido una experiencia "muy positiva" porque, según ha afirmado, "la gente empieza a salir de la burbuja donde hemos estado, empieza a expresar sus sentimientos y a reconocer sus errores".
El periodista vasco ha remarcado que las víctimas no quieren "protagonismo" pero tienen que aportar su "granito de arena para seguir avanzando en el camino de la convivencia". Por ello, ha demandado que, "más allá de conferencias rimbombantes, que están muy bien", se realicen "gestos".
Asimismo, Landaburu ha recalcado que él espera que ETA algún día le dé "una explicación" de por qué intentó matarle, al tiempo que ha insistido en que "tan injustificable y condenable es el terrorismo de Estado, como todos los atentados y amenazas de ETA". Finalmente, ha manifestado su deseo de que, al igual que el caso de Lasa y Zabala, se hiciera una película sobre el secuestro del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara.
ENCUENTROS
Por su parte, Pili Zabala ha señalado que el encuentro que mantuvo dentro de la iniciativa de Lokarri fue "muy agradable", más aún porque en el mismo estuvo presente un ex gobernador civil de Bizkaia, quien "públicamente, delante de todos los presentes, comentó que él conocía a compañeros suyos que habían ejercido el terrorismo de Estado y que estos, cada vez que había un atentado del GAL, no solamente brindaban con champán, sino que también se fumaban un puro".
En ese sentido, ha señalado que ese gesto "es emotivo, entrañable" y se agradece, pero ha manifestado que ella desea que eso "se haga público ante los medios de comunicación" los cuales, según ha dicho, "nos han hecho mucho daño, ocultando durante muchísimo tiempo unas realidades, porque nunca ha interesado dejar traslucir el sufrimiento de determinadas personas ni hablar claramente del terrorismo de Estado ejercido en una democracia".
Pili Zabala ha relatado que también tuvo la ocasión de recibir el apoyo de un alto cargo de la Policía Vasca que "claramente me comentó que la actuación de la Ertzaintza en el cementerio de Tolosa en el año 1995 fue deplorable" aunque, en este caso, ha considerado que "es cierto que la Ertzaintza de sus errores ha aprendido". "Quisiera decir lo mismo de la Guardia Civil y de la Policía Nacional", ha añadido.
Asimismo, ha demandado que el Estado "reconozca públicamente" el daño causado por las acciones del GAL y ha remarcado que "el terrorismo de Estado es una aberración". Además, ha rechazado la violencia de ETA y ha recordado que cuando la banda terrorista puso en 2007 una bomba en Zarautz, municipio en el que residía, su hija estuvo "una semana sin decir una palabra". "Cuando has vivido esas situaciones, sabes que la violencia no es el camino", ha concluido.
