Destruidos 126 cohetes antigranizos localizados en Mérida

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Foto: MINISTERIO DEL INTERIOR
Actualizado: viernes, 13 junio 2014 10:09
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MÉRIDA, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -

   La Guardia Civil ha destruido 126 cohetes granífugos (antigranizos), de los que está prohibido su uso desde hace años por cuestiones medioambientales y que han sido encontrados en una nave situada en una explotación agrícola en el término municipal de Mérida (Badajoz).

   Estos artefactos se encontraban almacenados en el interior de esa nave agrícola, sin guardar medida de seguridad alguna, rodeados de productos inflamables y "expuestos a un grave riesgo de accidente por explosión", según ha informado la Guardia Civil en nota de prensa.

   El Grupo de Desactivación de Explosivos de Extremadura, ubicado en la Comandancia de Cáceres, se desplazó hasta el lugar donde se encontraban los explosivos y procedió a la catalogación, calibración y estudio de los artefactos, con la comprobación de que se trataba de dos lotes diferentes de cohetes antigranizos.

   El material encontrado tenía una fecha de caducidad de los años 2009 y 2011 y habían sido fabricados en dos cuerpos, un primero compuesto de carcasa de plástico con cerilla eléctrica y pólvora prensada que actúa como propulsor, y un segundo o cabeza, que se compone de detonador con carga de explosivo de yoduro de plata. Ésta parte es la que explosiona en la nube, evita su condensación y enfriamiento, impide que granice y garantiza que descargue en forma de lluvia.

   Los artefactos, tras su análisis, fueron trasladados hasta una cantera próxima del municipio pacense de Mérida, "donde una vez adoptadas las medidas de seguridad necesarias", procedieron a la destrucción de todos los artefactos pirotécnicos.

   Estos cohetes, con un peso de 2,250 gramos cada uno, tenían una carga explosiva superior a un kilogramo, compuesta por pólvora prensada y trilita y llegaban a alcanzar en su lanzamiento una altura de 3.000 metros.

   Los agentes, dada la carga existente en cada artefacto, tuvieron que emplear cuatro días en consumir todo el material explosivo, con la realización de un total de 58 explosiones, para la destrucción de los 126 cohetes.

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