CÁCERES, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
La fiesta 'La Encamisá' en Torrejoncillo (Cáceres) espera congregar el próximo miércoles, día 7 de diciembre, a un total de 250 jinetes, que portarán farolas, y escopeteros que descargarán entre 200 y 300 cartuchos cada uno en honor a su patrona, María Inmaculada.
Así, este miércoles ha sido la presentación de este evento que fue reconocido como Fiesta de Interés Regional en 1968 y Fiesta de Interés Nacional en 1978, según ha recordado el presidente de la Asociación 'Paladines de la Encamisá', Pedro Damián Alviz.
Este festejo tradicional tiene "orígenes desconocidos", según ha apuntado el alcalde de Torrejoncillo, Moisés Leivi, que también estaba en la rueda de prensa. Lo que sí se conoce es que es que se remonta a un hecho bélico, una estratagema militar, en la que unos jinetes torrejoncillanos envueltos con sábanas blancas y cargados de escopetas acudieron a la plaza donde se estaba librando la batalla en medio de la nieve.
Un combate en el que los militares del municipio se encomendaron a la Virgen María Inmaculada, y lograron salir victoriosos. De esta manera, con este evento que ahora tiene un cariz religioso, reproducen la batalla en agradecimiento a la patrona de la localidad.
El acto central será a las 22.00 horas del miércoles, día 7, cuando el estandarte de 'María Inmaculada' y su posterior 'Procesión de la Encamisá' salgan por las calles del municipio. Durante más de 25 años es la Asociación 'Paladines de la Encamisá' la encargada de organizar el evento. Este año les toca a ellos ser mayordomos, y son los que han elegido a través de un sorteo entre sus socios al portaestandarte.
El agraciado ha sido David, un joven que ha decidido cedérselo a su padre porque sabía que llevar el portaestandarte le hacía "mucha ilusión", ha expresado David. Por ello, José Vicente Martín será el encargado de representar durante esta fiesta a la asociación, algo que llevaba desde hace 25 años, que cumplió la mayoría de edad, soñando en serlo.
"Es el mayor orgullo que puede tener un torrejoncillano", ha expresado. Su misión consiste en acompañar a los paladines en toda la fiesta; ofrendas, pregón, y sobre todo en la noche de La Encamisá, que es cuando el portaestandarte vive "su noche", ha indicado Martín.
Esa noche, a las 21.00 horas mientras que los vecinos del municipio llegan a pie a la plaza, el portaestandarte se coloca la sábana en la Sede de la Asociación Paladines. Allí el resto de jinetes recogen el farol que tienen que llevar y van hacia la plaza.
A las 22.00 horas se abren las puertas de la iglesia que está situada en la plaza y el párroco sale con el estandarte. El cura se lo entrega a un miembro de la junta directiva de la asociación, que también hacen el recorrido, y este será el encargado de hacérselo llegar el portaestandarte, en este caso, a José Vicente Martín. Es en ese momento cuando comienza la procesión, y cuando los escopeteros "lanzan el mayor número de cartuchos", según ha explicado Alviz.
UNOS 10.000 DULCES Y 100 LITROS DE VINO
Al término de la procesión, la asociación invitará a los asistentes a un convite con dulces que se llevará a cabo en su sede, situada en la calle Don Lorenzo Díaz. También lo hará el jueves, 8 de diciembre, día de la Pura, en el que se celebra la Misa Mayor, y el viernes, día 9, día de la Pura chica, dedicada a los más jóvenes.
En total la asociación ha preparado 10.000 dulces (5.000 coquillos y 5.000 cañas) para estos días de celebración. También habrá vino, en total el presidente de Paladines ha calculado un total de 100 litros.
Aunque los festejos en torno a 'La Encamisá' comienzan el día 30 de noviembre con el novenario en honor a María Inmaculada, previamente se han llevado a cabo distintas actividades en los centros educativos del municipio.
Por ejemplo, ha habido concursos literarios, concursos deportivos o un viaje a Nava del Rey (Valladolid), con motivo del hermanamiento de ambas localidades y de las asoaciaciones de 'Hijas de María' de Navas del Rey con 'Paladines de la Encamisá' de Torrejoncillo a través de la Inmaculada Concepción.
