La Asociación Monte Pindo denuncia el "abandono" de la Xunta, que provoca que la presencia de eucalipto amenace al autóctono roble enano
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -
Una marcha reivindicativa recorrerá este sábado, 13 de septiembre, el Monte Pindo para reclamar a la Xunta recursos para la protección de este espacio natural cuando se cumple un año del incendio que arrasó unas 2.000 hectáreas del conocido como 'Olimpo Celta', y para denunciar la situación de "abandono" en la que se encuentra en la actualidad.
De este modo, la Asociación Monte Pindo es la convocante de esta marcha en colaboración con otras entidades como Adega, en una caminata de unos 10 kilómetros que arrancará a las 10,00 horas del sábado, 13 de septiembre, de Caldebarcos (Carnota), y que pasará por Chan das Lamas, San Xurxo y Laxe da Moa antes de volver al lugar de salida.
Y es que la Asociación Monte Pindo denuncia que, un año después, "el abandono de la Xunta y los intereses empresariales se aliaron en la sustitución de vegetación autóctona por el eucalipto, especie que le interesa especialmente a la industria pastera".
De hecho, la Asociación alerta de que representantes de estas pasteras están visitando a vecinos y propietarios en las faltas del Monte Pindo para "generosamente" retirarles la madera quemada de sus fincas y proceder a un posterior repoblación, "siempre con eucalipto".
En concreto, el eucalipto antes que antes tenía una presencia "anecdótica" en "pleno lugar de interés comunitario Rede Natura 2000", "hoy mismo amenaza el hábitat del roble enano", el considerado como "joya de la corona" del lugar -- --especie protegida de la que sólo se tiene constancia en el Monte Pindo--.
Así, la Asociación Monte Pindo acusa a la Xunta de ignorar "deliberadamente" las voces de 169 instituciones, vecinos, partidos políticos, así como organizaciones empresariales y ecologistas que demandan una declaración del Monte Pindo como Parque Natural, "con cuyas dotaciones económicas y humanas se pueda atajar sus problemáticas".
Con todo, un año después del incendio la zona comienza a recuperarse de forma natural a pesar de "la gran afectación del fuego, la brutal erosión del terreno y la ausencia de la Xunta", ya que el roble enano y el lirio de monte lograron sobrevivir.
