MADRID, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha expresado este viernes su "preocupación" ante el "grave empeoramiento" de las condiciones en las que se encuentran los migrantes detenidos en Libia, donde habría más de 8.000 personas recluidas sin un mínimo de garantías.
La "creciente saturación" de los centros de detención y la falta de un mínimo nivel de vida han derivado en un aumento de los disturbios y las huelgas de hambre, lo que ha provocado a su vez "graves incidentes de seguridad", según un comunicado de ACNUR, que ha reclamado una solución urgente.
ACNUR, que teme especialmente por la situación de 4.500 de estos migrantes, ha instado a otros países a ofrecer vías "seguras y legales" como la reubicación para evitar este cuello de botella en el que se ha convertido Libia, desde donde parten la amplia mayoría de las pateras que quieren llegar a las costas de Italia.
Solo este año, la Guardia Costera libia ha interceptado en el mar a casi 13.000 migrantes y refugiados, entre ellos más de 1.200 niños. La mayoría de estas personas proceden de Sudán, Nigeria y Eritrea, según los datos con los que cuenta ACNUR, que intenta a duras penas atender a quienes luego permanecen meses o incluso años recluidos en los centros de detención.
El número de fallecidos rescatados por los guardacostas libios se acerca ya al centenar (97) y se suma a los más de 1.500 registrados desde el 1 de enero en todo el Mediterráneo.
ACNUR ha asegurado que casi 55.000 personas están registradas como refugiadas y solicitantes de asilo en Libia, un país marcado por el caos político y administrativo. Actualmente, unos 8.000 migrantes están recluidos en al menos 18 centros vinculados al Gobierno de unidad reconocido por la comunidad internacional.
La agencia de la ONU y otros actores humanitarios intentan "aliviar el sufrimiento de los detenidos" e identificar a quienes necesitan protección internacional, al tiempo que trabajan por una "solución duradera" para resolver la situación de unos centros donde la vida sigue siendo "extremadamente dura".
