MADRID, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
Más de 500 personas han muerto a causa de los dos meses de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad filipinas y los insurgentes islamistas del Grupo Maute por el control de la ciudad de Marawi, según el balance oficial proporcionado este lunes por el Gobierno de Rodrigo Duterte.
El Palacio de Malacañán ha indicado que, de acuerdo con el recuento de víctimas mortales realizado hasta el domingo por la tarde (hora local), un total de 507 personas han fallecido durante el sitio de Marawi, de las cuales 379 son terroristas, 89 miembros de las fuerzas filipinas y 39 civiles.
Por su parte, el portavoz de las Fuerzas Armadas, el general Restituto Padilla, ha revelado en declaraciones a CNN Filipinas que ya solo hay entre 80 y 100 combatientes del Grupo Maute en Marawi, entre los que ha incluido a los líderes de la guerrilla islamista y al jefe de Abú Sayyaf, Isnilon Hapilon.
Padilla ha explicado que el avance sobre el terreno es lento porque los milicianos usan a la población civil como escudos humanos y han colocado francotiradores y artefactos explosivos en puntos estratégicos de Marawi, a pesar de lo cual ha anticipado que la victoria llegará pronto.
Los combatientes del Grupo Maute y Abú Sayyaf se atrincheraron el pasado 23 de mayo en Marawi con la intención de instaurar allí un Estado islámico. En respuesta, Duterte declaró la ley marcial para toda la región de Mindanao y ha ordenado continuar los combates hasta la rendición total de los terroristas.
