RANGÚN, 27 May. (Reuters/EP) -
Cientos de personas se han manifestado este miércoles en las calles Rangún para denunciar las presiones internacionales contra el Gobierno birmano, al que se ha culpado de la huida a otros países de cientos de musulmanes rohingya.
En torno a 300 personas lideradas por unos 30 monjes budistas han clamado contra Naciones Unidas y los medios de comunicación occidentales, a los que acusan de poner el foco de las crisis de inmigración en las autoridades birmanas. En las últimas semanas, múltiples embarcaciones llenas de inmigrantes han navegado sin rumbo las aguas del mar de Andamán, donde han sido rechazadas por las autoridades de Malasia, Tailandia e Indonesia.
Así, los líderes de la protesta han apuntado a que la inmensa mayoría de los rescatados provenían del vecino Bangladesh, los cuales aseguran ser rohingya para recibir protección internacional.
"Si la comunidad internacional presiona al Gobierno birmano a aceptar las embarcaciones de Bangladesh, pedimos al Gobierno que resista", ha afirmado Thar War, uno de los líderes de la protesta y miembro de una organización nacionalista.
"Los bangladeshíes no respetan el budismo por eso no son ciudadanos birmanos, es así de simple", ha asegurado Thu Dammyra, un monje que pertenece a un grupo de extrema derecha.
En la protesta, que ha estado marcada por mensajes que vinculaban a los inmigrantes con el terrorismo, se ha instado al Gobierno birmano a emplear el encuentro regional entre 17 países del sudeste asiático para oponerse a la presión de las naciones vecinas.
Birmania achaca esta crisis humanitaria al tráfico de personas y a las redes de contrabando y ha negado categóricamente que sus políticas exclusionistas hacia la comunidad rohingya tenga relación alguna con su salida masiva del país.
Este martes, el Gobierno anunció un acuerdo con Bangladesh para la repatriación de 200 bangladeshíes rescatados recientemente de un bote que se encontraba a la deriva frente a las costas birmanas.
