MADRID, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
El comandante de la 'Operación Resolución Inherente', Stephen Townsend, ha defendido este martes que el bombardeo ejecutado la semana pasada en la localidad siria de Al Mansura, que impactó en una escuela, mató a yihadistas, y no a civiles.
El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos informó de la muerte de 33 civiles en el bombardeo contra el edificio, en la que se encontraban alrededor de 40 familias desplazadas por los combates en las provincias de Homs y Alepo.
Sin embargo, Townsend ha afirmado que, si bien las investigaciones no han terminado, "la valoración inicial es que eso no es creíble". "Creo que fue un bombardeo limpio", ha agregado.
"Tenemos múltiples informaciones de Inteligencia de varios tipos que corroboran que el enemigo estaba usando esa escuela. Lo observamos. Vimos lo que esperábamos ver. Atacamos. Vimos lo que esperábamos ver", ha sostenido.
"Tras ello, tenemos alegaciones de que no eran milicianos de Estado Islámico (...) de que eran refugiados de algún tipo. No hemos visto pruebas que lo corroboren", ha manifestado.
Por ello, Townsend ha reiterado que "todo lo que se ha visto sugiera que había unos 30 combatientes de Estado Islámico", remachando que "se atacó a combatientes enemigos que contábamos con que estuviern allí".
Al Mansura se encuentra ubicada en los alrededores de la localidad de Raqqa, el principal bastión de los yihadistas en el país árabe.
La coalición da cobertura aérea a las operaciones de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), que comprenden unidades árabes y kurdas --entre ellas las Unidades de Protección Popular (YPG)--, que anunciaron el 6 de noviembre el comienzo de las operaciones para la reconquista de Raqqa.
