WASHINGTON, 8 Nov. (Reuters/EP) -
El Partido Demócrata se ha hecho con importantes plazas en las elecciones estatales y locales que se celebraron el martes en Estados Unidos, en su primera gran victoria electoral de los últimos años, después de ceder el Congreso y la Casa Blanca a los republicanos.
El triunfo más notable ha sido en Virginia, donde los demócratas han conseguido su mejor resultado histórico en los comicios legislativos --con un total de 16 escaños-- y han ganado la Gobernación con Ralph Northam, a pesar de que su rival republicano, Ed Gillespie, le había acusado de ser indulgente con la pandilla salvadoreña Mara Salvatrucha.
Trump, que se encuentra de gira por Asia, ha achacado esta derrota a que "Gillespie ha trabajado duro" pero "no se ha adherido a sus ideas". "No se olviden, los republicanos ganaron cuatro escaños de cuatro y con la economía mejorando continuarán ganando", ha afirmado en alusión al Senado estatal.
Destaca también la reelección de Bill de Blasio como alcalde de Nueva York, ya que el edil demócrata es uno de los mayores críticos de Trump, que sigue sin convencer en su ciudad.
El azul de los demócratas se ha repetido en las votaciones de costa a costa, un resultado que ni siquiera ellos esperaban. "Para ser honesta, esto ha superado nuestras expectativas más ambiciosas", ha dicho Catherine Vaughan, cofundadora de Flippable, un grupo progresista que trabaja desde las bases para reformar el partido.
Estos comicios han animado a los demócratas, que no obtenían el 'placet' de las urnas desde la reelección de Barack Obama en la Casa Blanca, si bien los expertos advierten de que aún es pronto para vaticinar un resultado similar en las 'midterm' de 2018.
"Realmente no se puede dejar de ver en estos resultados que los demócratas son ahora los favoritos para quedarse con la Cámara de Representantes" y el Senado, ha dicho en Twitter Dave Wasserman, que ha analizado estos comicios para el informe político independiente Cook.
