Actualizado: lunes, 6 febrero 2017 10:17

MANILA, 6 Feb. (Reuters/EP) -

Soldados filipinos han detenido este lunes a un líder rebelde comunista, días después de que el presidente del país, Rodrigo Duterte, anulara el alto el fuego con los insurgentes, tras lo que se han producido enfrentamientos en varios puntos entre estos y el Ejército.

Duterte anunció el viernes que el Gobierno ponía fin al alto el fuego con el Nuevo Ejército del Pueblo (NEP) y ordenó a los soldados que se prepararan para la lucha, afirmando que los rebeldes estaban haciendo demandas "enormes" e inaceptables pese a las concesiones del Gobierno.

El líder rebelde detenido este lunes, Ariel Arbitrario, figura entre las decenas de guerrilleros liberados el año pasado cuando el Gobierno y los rebeldes reanudaron las conversaciones de paz. Ha sido interceptado en un puesto de control militar en la ciudad de Davao, en el sur de Filipinas, según un portavoz militar.

"Ha sido detenido en base al pronunciamiento del presidente Duterte de volver a detener a todos los que fueron liberados temporalmente para participar en las conversaciones de paz", ha explicado a la prensa el portavoz, capitán Rhyan Batchar. "Él y un compañero serán llevados de vuelta a prisión", ha añadido.

El conflicto entre el Gobierno y el NEP, el brazo armado del Partido Comunista de Filipinas, comenzó en 1969 y en él han muerto más de 40.000 personas.

La llegada de Duterte al poder había generado esperanzas de que se pusiera fin a la insurgencia comunista en el país, que ha lastrado el desarrollo, especialmente en las zonas centrales de Filipinas. El mes pasado, el Gobierno pidió al Departamento de Estado nortamericano que eliminara al fundador del movimiento rebelde y líder del mismo, Jose Maria Sison, de su lista negra de terroristas para hacer avanzar la negociación.

Pero ambas partes intercambiaron posteriormente acusaciones de violación de la tregua y de negociar con mala fe. "Vayamos a la guerra", ha dicho este lunes Duterte en un discurso, llamando a los rebeldes "niños mimados" que piden demasiado del Gobierno. Ahora, el presidente define al NEP como grupo terrorista.

Otro portavoz militar ha señalado que ha habido un repunte en las escaramuzas entre el Ejército y los rebeldes en el centro y el sur del país en las últimas 48 horas. Otros tres rebeldes han sido capturados y uno más ha muerto en un enfrentamiento, ha explicado el coronel Edgard Arevalo.

En otro incidente separado este domingo, los soldados mataron a un guerrillero en un enfrentamiento en la isla centra de Mindoro, mientras que también hubo escaramuzas en Iloilo y Masbate, también en el centro del país, según Arevalo.

En el punto álgido de la rebelión maoísta, había 25.000 combatientes pero actualmente contaría con unos 3.000. El Ejército ha dicho que los rebeldes están concentrados en el este del país, donde hay muchas plantaciones y minas, principales fuentes para su financiación.

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