Actualizado: domingo, 17 junio 2007 19:00

JERUSALÉN, 17 Jun. (EUROPA PRESS)

El Gobierno de emergencia creado por el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, tomó hoy posesión a pesar de la oposición del ya destituido primer ministro Ismail Haniyeh y de su partido, el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás). Mientras, sigue la confusión tanto en Cisjordania como en el paso fronterizo de Erez, donde cientos de palestinos se hacinan para intentar salir de la Franja de Gaza, ahora controlada por Hamás.

Salam Fayad, el nuevo primer ministro palestino, y once ministros más tomaron hoy posesión jurando sus cargos ante el presidente Abbas y marcaron como los dos principales objetivos del gabinete lograr el levantamiento del embargo impuesto por la comunidad internacional y la restitución de la seguridad en unos territorios palestinos ahora divididos tras la toma de la Franja de Gaza.

Para Abbas, el nuevo ejecutivo nombrado por él tras la disolución del Gobierno de coalición presidido por Hamás, es el Gobierno de todos los palestinos.

"Este es nuestro Gobierno, el Gobierno del pueblo palestino en Cisjordania y Gaza. El primer objetivo por el que estamos trabajando es el levantamiento del asedio (embargo) y la consecución de una relación única con todas las naciones", afirmó Abbas.

El presidente, máximo dirigente también del movimiento nacionalista Al Fatá, aseguró estar dispuesto a aplicar la ley y el orden "porque hay una autoridad, una ley y una sola fuerza de seguridad en todas las zonas de nuestra patria, en Cisjordania y Gaza".

Fayad insistió en que el nuevo Gobierno es el de todos los palestinos, de todos los territorios palestinos y prometió reestablecer la seguridad para los palestinos y poner fin al caos en Gaza y Cisjordania.

En sus primeras palabras tras la investidura, Fayad, un respetado economista que servirá también como ministro de Finanzas, prometió "trabajar sistemáticamente, con las manos limpias" para recuperar el control y devolver la estabilidad a la región.

Además, Fayad también tuvo palabras para los palestinos residentes en Gaza, ahora en manos de Hamás. "Estáis en nuestros corazones y sois nuestros primeros objetivos. Ni las oscuras imágenes ni las vergüenzas que son ajenas a nuestras tradiciones van a detenernos", declaró. "Es hora de trabajar juntos por Palestina", apuntó. Según Fayad, restablecer la seguridad "es difícil, pero no imposible".

El gabinete, formado por pocos miembros, está dominado por independientes entre los que destacan algunos activistas pro-Derechos Humanos y empresarios, aunque el ministro del Interior, Abdel Razak Yehiyeh, sí es un político profesional y, aunque no está afiliado, es afín a Al Fatá.

DECRETOS CONTRA HAMÁS

Esta toma de posesión sólo ha sido posible gracias a uno de los dos polémicos decretos promulgados hoy por Abbas. En el primero de ellos, Abbas deroga la disposición que obligaba al Gobierno palestino a ser aprobado por el Parlamento. El poder legislativo está en manos de Hamás desde que en enero del año pasado ganara por mayoría absoluta las elecciones generales, por lo que sería imposible lograr la aprobación de la cámara para este gabinete afín a Al Fatá.

En un segundo decreto presidencial, Abbas ilegalizó al movimiento Hamás así como a todas las milicias afines a los islamistas. En el texto, Abbas explica su decisión de "considerar a la Fuerza Ejecutiva y a todas sus milicias como ilegales", y las responsabiliza de un "golpe militar contra la legitimidad palestina y sus instituciones". La Fuerza Ejecutiva es el cuerpo policial creado por el Ministerio del Interior palestino controlado por Hamás para ejercer de contrapeso a la Guardia Presidencial, el cuerpo policial dependiente de la Presidencia.

El decreto especifica que "cualquiera involucrado en estos de estos grupos será castigado, de acuerdo con la ley y con las órdenes derivadas del estado de emergencia".

Todos los componentes de la Fuerza Ejecutiva y de las milicias afines a Hamás, como las Brigadas al Quds, serán procesados conforme a la legislación del estado de emergencia, según el decreto.

REACCIÓN DE HAMÁS

Mientras, el Movimiento de Resistencia Islámica calificó de "ilegal e ilegítimo" al nuevo Gobierno a través de su portavoz en la franja de Gaza, Ismail Radwan.

"El Movimiento de Resistencia Islámica considera este Gobierno ilegítimo e ilegal. No lo reconoceremos. No trabajaremos con él", sentenció Radwan.

A pesar de la oposición de Hamás al Gobierno, Radwan afirmó que los islamistas no castigarán a los ministros que sean de Gaza.

También el destituido primer ministro palestino, Ismail Haniyeh, afín a Hamás, insistió hoy desde Gaza en que el ejecutivo de coalición formado por Al Fatá y Hamás sigue siendo el legítimo Gobierno palestino.

"El consejo de ministros considera sin base jurídica los pasos dados por el presidente Mahmud Abbas. El Gobierno de unidad palestino afirma aquí que vamos a cumplir con nuestras obligaciones de acuerdo a la ley", apuntó Haniyeh.

En aparente respuesta a los decretos de Abbas, Haniyeh destituyó al jefe de Seguridad Interna, Rashid Abu Shbak, y al director general de la Policía palestina en la Franja de Gaza, Kamal Sheij, según la televisión Al Aqsa TV, afín a Hamás. Estas medidas son meramente simbólicas, ya que ambos se encuentran ya en Cisjordania.

"NUEVA OPORTUNIDAD" Y CRISIS EN GAZA

El primer ministro israelí, Ehud Olmert, afirmó hoy que la formación de un nuevo Gobierno palestino es una "oportunidad" para dar nuevos pasos hacia la paz.

"Tenemos una nueva oportunidad en estos últimos días que no habíamos tenido desde hacía mucho tiempo", dijo Olmert a los periodistas antes de tomar un vuelo a Estados Unidos para realizar una visita a la Casa Blanca. "Un Gobierno que no es Hamás es un compañero", añadió.

Con respecto a la crisis que vive Gaza, Olmert afirmó que su Gobierno no permitirá que la Franja de Gaza viva una situación de crisis humanitaria y que Israel encontrará un modo de ayudar a aprovisionar de comida y medicamentos a los habitantes de la región a través de las agencias internacionales de ayuda humanitaria.

El ministro de Infraestructuras, Benjamin ben Eliezer, apuntó hoy, sin embargo, que Israel impedirá cualquier ayuda con destino a la Franja de Gaza hasta que se aclare la situación. "Debemos impedir cualquier ayuda y asistencia a la Franja. Voy a ordenar la congelación de todo hasta que comprenda lo que está sucediendo allí", afirmó Ben Eliezer.

"Simplemente debemos incrementar la segregación entre Gaza y Judea y Samaria, aislarlas completamente. La única entrada que debemos dejar abierta es la de Rafá", en la frontera entre Gaza y Egipto, afirmó el ministro.

El próximo miércoles, Ben Eliezer presidirá una reunión en la que se tratará el futuro del abastecimiento de agua, combustibles y electricidad para la Franja de Gaza.

Hoy mismo, la empresa israelí Dor Alon anunció el cese del suministro de combustible a las gasolineras de Gaza ante la toma de poder efectuada por Hamás en la práctica totalidad del territorio, aunque precisó que seguiría suministrando gasolina a la central eléctrica de Gaza, según una portavoz de la empresa.

El suministro será interrumpido de forma inmediata, según dicha portavoz, que no dio su nombre en cumplimiento de la normativa de la empresa. Dor Alon tomó esta medida en coordinación con el Ejército y el Ministerio de Defensa israelíes.

Está previsto que este corte del suministro de gas provoque desabastecimiento para los hogares y para los usuarios de vehículos.

Más noticias