ESTAMBUL, 26 Mar. (Reuters/EP) -
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha advertido este jueves a Irán de que no tolerará su intento de "dominar la región", en alusión a su apoyo a las milicias huthis que han derrocado al Gobierno de Abdo Rabbu Mansur Hadi en Yemen.
"Irán está intentando dominar la región ¿Se lo podemos permitir?", ha planteado Erdogan en una rueda de prensa. "Esto ha empezado a molestar a Turquía, a Arabia Saudí y a otros países del Golfo (Pérsico). No podemos tolerarlo", ha contestado.
El líder turco ha instado a Irán a "cambiar su postura". "Tiene que retirar cualquier fuerza (que tenga sobre el terreno), ya sea en Yemen, en Siria o en Irak. Tiene que respetar la integridad territorial de los países", ha subrayado.
Horas antes, en una entrevista concedida a France 24, Erdogan ha respaldado la 'Operación Tormenta Definitiva' que han puesto en marcha los países del Golfo para frenar el avance huthi y ha adelantado que Turquía podría dar "apoyo logístico".
CRISIS YEMENÍ
Arabia Saudí ha asumido el liderazgo de la 'Operación Tormenta Definitiva', con la que, junto a Emiratos Árabes Unidos (EAU), Bahréin, Qatar y Kuwait intentará "repeler a las milicias huthis, Al Qaeda y el Estado Islámico" en Yemen.
Las monarquías del Golfo Pérsico temen que la influencia de Irán en la región se extienda con el ascenso de los huthis al poder, en medio de la inestabilidad generada por el conflicto iraquí y la guerra civil en Siria.
El presidente yemení había apelado directamente al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, en una carta enviada esta semana, para que autorizara una intervención militar para frenar "la agresión de los huthis" contra su Gobierno.
La crisis política en Yemen, fruto de las disputas intestinas no resueltas con la caída del Gobierno de Alí Abdulá Salé, en 2011, se agravó el pasado mes de septiembre con la irrupción en Saná de los rebeldes chiíes.
Los huthis, que históricamente han reivindicado mayor autonomía para el norte de Yemen, llevaron a Hadi y su Gobierno a dimitir en bloque el pasado mes de enero, evidenciando así la pugna por el control de un país al borde de la guerra civil.
